Derriban las naves de la Granja del Poni, paso previo a la construcción de viviendas

El proceso urbanístico de esta zona de la ciudad arrancó a finales de los 90 y ha pegado un acelerón en los últimos años, tras el impás de la crisis de 2008. Si en 2020 había cuatro promociones en marcha y quedaban tres grandes parcelas a la venta, ya no resta ninguna. Y esta de la Granja del Poni era la última finca que se resistía al auge que vivía su entorno, a pesar de que hace años que estaba en desuso y su imagen era cada vez más degradada; con naves en mal estado, escombros acumulados, grafitis en las paredes y malas hierbas trepando por los muros.

Las intervenciones en esta finca están en una fase muy inicial, ya que aún tienen que terminar de derribar las infraestructuras existentes y terminar el proyecto de viviendas para, posteriormente, obtener la licencia de obra que dé luz verde a la empresa para levantar el inmueble. En el resto de la S-20, hay otras dos promociones en obras. Cuando las tres estén finalizadas, ya no quedarán espacios libres en este frente, una de las áreas de Santander que más se está expandiendo en las últimas décadas.

La promoción más avanzada de las tres pendientes es la que está junto al McDonald's, también a cargo de Robera 2000, una urbanización denominada El Sauce con viviendas a partir de los 68 metros cuadrados, jardines y terrazas y plazas de garaje. Serán un total de 82 viviendas con un gran zócalo para comercios en la planta baja, de más de 2.000 metros cuadrados de superficie.

La otra finca donde también se levantarán viviendas está cerca de esta, las separan tres edificios y las obras correrán a cargo de Inmobiliaria Navarra y Construcciones Arami Latapia. Aunque sus proyectos son independientes en fincas contiguas, el Plan General de Santander, de 1997, obligó a hacer una modificación de sus proyectos para conectar ambos edificios, aunque sea solamente a través de la planta baja.

La S-20, que empezó a urbanizarse hace casi treinta años, se convirtió enseguida en una de las zonas de expansión más importantes de la ciudad. Prueba de ello son las decenas de construcciones que se ejecutaron en ese gran vial que nació para dar servicio de entrada y salida a la ciudad por El Sardinero y la costa norte de Cueto y Monte. Lo que se desconocía entonces era que los alrededores de esta avenida se convertirían en lo que hoy es prácticamente una ciudad independiente. Lo cierto es que actualmente un vecino de la zona no necesita acudir al centro de Santander para suplir cualquier servicio básico. En total, esta vía tiene más de cincuenta promociones y cerca de 3.000 viviendas. Eso, sin tener en cuenta las calles aledañas, que elevaría estos números mucho más.

Pero la expansión no ha ido siempre viento en popa y, aunque durante mucho tiempo la construcción avanzó a pasos agigantados, la crisis económica de 2008 marcó un antes y un después en esta zona. El crecimiento de la S-20 paró en seco y tardó varios años en remontar, como ocurrió en el resto de España. Una vez volvió a arrancar, además de las promociones de viviendas, empezó a darse importancia a los servicios y se construyeron varios supermercados, como Lupa, Mercadona, Aldi y BM, al igual que también se dio espacio a la restauración, con populares cadenas de hamburgueserías como McDonald's y Burger King.