El edificio de la piscina incluye el primer rocódromo municipal de Santander

Además, se ha triplicado el espacio del gimnasio en la planta superior, que ocupa 430 metros cuadrados y desde el que se ve el exterior del complejo, con unas chapas microperforadas que, sin embargo, impiden la visión de fuera hacia dentro. También se ha dotado el nuevo espacio de dos salas multideporte y una zona de espá, con piscina de hidromasaje y sauna en el vestuario femenino.

La alcaldesa, Gema Igual, visitó ayer el final de las obras de ampliación, que han contado con una inversión de 1.620.000 euros. En la visita estuvo acompañada por el concejal de Fomento, César Díaz, y el director del Instituto Municipal de Deporte, IMD, Luis Pérez. La regidora recordó que este complejo Ruth Beitia tiene un millón de usos al año y destacó que esta obra «repercutirá tanto en los 2.300 abonados de la piscina como en los 2.600 abonados del complejo» que en ocasiones veían saturadas las zonas comunes y los vestuarios.

La alcaldesa felicitó la solución planteada por De La Fuente Arquitectos y el trabajo ejecutado por Arruti Sercom. La actuación incluye la reforma de los vestuarios, el servicio médico y la recepción, con entradas diferenciadas para alumnos de las escuelas deportivas y los que acudan al rocódromo y al gimnasio.

«Para el Ayuntamiento es muy importante el área de deportes por eso en los últimos años hemos realizado innumerables actuaciones en este complejo», resaltó Igual.