Secciones
Servicios
Destacamos
Una emoción contenida se palpaba en el momento de El Encuentro, a las ocho y media de la tarde, en la calle de Juan de Herrera, delante de la iglesia de La Anunciación, con las imágenes del Nazareno, con la cruz a cuestas: allí se ... vieron las caras el Señor de la Misericordia, de la cofradía de La Inmaculada (padres Carmelitas), y la Virgen de la Amargura, de la cofradía de La Pasión (padres Pasionistas). Una hora y media antes, La Pasión partió de los Pasionistas, recorriendo las calles Nicolás Salmerón, Madrid, Rodríguez, Cádiz, Lealtad y, por fin, Juan de Herrera. A las ocho menos cuarto, La Inmaculada salió de la iglesia de los Carmelitas, pasando por Lope de Vega, Valliciergo, Santa Lucía, Arrabal, San José y plazas del Príncipe y Porticada, antes de llegar a Juan de Herrera.
El momento más entrañable se produjo cuando el Señor de la Misericordia, el hijo, se posó esperando a la Virgen de la Amargura, la madre, que avanzó por Juan de Herrera, bajo palio, bailando al son de los tambores y la música de la banda de Cigales, de Valladolid. Tras ella, el sol poniéndose y todos los asistentes en silencio. No es de extrañar que los cofrades de La Inmaculada y los de La Pasión vivan con especial sentimiento este momento, que llegó a su punto más álgido cuando ambos se encontraron, frente a frente. Esta emoción también se trasladó a los centenares de personas que siguieron la procesión, que rompieron en un gran aplauso.
El primero en asomar a la calle Juan de Herrera, casi a la altura de la calle Puente, fue el Señor de la Misericordia, acompasado por la banda de música de San Celedonio. En ese momento, Rosa Sánchez, que lleva cerca de diez años asistiendo a esta procesión, ya tenía la expresión marcada por la emoción: «Es la más recogida, la más bonita y la que más me transmite», reconocía.
Tras El Encuentro, vuelta cada uno a su iglesia, a la espera de la Semana Santa del año próximo, y como dijo una fiel seguidora, Sara Martínez, «ojalá haga una tarde como esta, fría pero con sol».
El Miércoles Santo tendrá lugar la procesión de El Perdón y Silencio, organizada por la Archicofradía de la Celeste y Real Militar Orden de Nuestro Señor de la Merced de Santander. A las 20.00 horas partirá de la capilla de La Merced, en la calle Bonifaz, con las imágenes de Jesús Nazareno y de la Virgen de la Merced. Su destino será la parroquia de la Consolación, en la calle Alta, donde se realizará una estación de penitencia. Este año tampoco habrá indulto para un condenado.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.