Los empleados de Servicios Sociales piden más seguridad ante insultos y agresiones

Este servicio ronda los 80 empleados y los puestos van desde la teleasistencia y asistencia a domicilio de personas mayores a la atención en el Ayuntamiento, en el centro de acogida Princesa Letizia y en las unidades repartidas por los barrios de la ciudad. La primera, en principio, no entraña riesgo, pero el resto sí. Dependiendo de la situación más o menos delicada de cada usuario, algunos llegan a reaccionar de forma agresiva contra los trabajadores. Pando enumera unos cuantos escenarios: «Un cónyuge que ataca al empleado que gestiona su caso de violencia de género, gente que te escupe si no está de acuerdo con algo... Incluso a domicilio, una persona con discapacidad levantó la mano a una trabajadora y tuvo que salir corriendo». También cuenta cómo, en una unidad de Servicios Sociales, un usuario amenazó de muerte a una trabajadora y a la mañana siguiente la esperaba en la entrada de la oficina.

Como explica el portavoz de CC OO, Eugenio Caballero, actualmente cuentan con un sistema de alarma «insuficiente». «Le das y suena alto, lo suficiente para que lo escuche el compañero de la sala de al lado, pero en las unidades, donde solo hay dos empleados, no son suficientes para enfrentarse a un conflicto», cuenta. Por eso, piden medidas más eficaces y el plus de peligrosidad. Aunque apuntan que el concejal de Servicios Sociales, Álvaro Lavín, se muestra de su parte, el de Personal, Pedro Nalda, no les da una respuesta. «Luego llegan las elecciones, hay que formar un nuevo equipo de gobierno, y estas cosas se olvidan», lamenta Caballero.