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El polvo y las telas de araña se acumulan en el edificio que alberga el viejo Hotel Colón, en la Plaza de las Brisas 1, frente a los Jardines de Piquío. Con todas sus persianas cerradas a cal y canto y un aspecto destartalado, nada ... sugiere -salvo por la alarma que se ha instalado en su fachada- que existe un proyecto en marcha para su próxima reapertura como establecimiento hotelero. Eso sí, primero tendrá que acometerse una profunda reforma del inmueble, que contará además con seis plazas de garaje, según recoge el expediente de solicitud de licencia de actividad presentado el 19 de noviembre en el Ayuntamiento de Santander.
Nada se conocía acerca del inversor que había adquirido la propiedad en mayo de 2023 por una cantidad estimada entre 4 y 2,5 millones de euros. Desde aquel cambio de manos, año y medio ha pasado sin conocerse ni el nombre del nuevo propietario ni el uso que se le iba a dar, ya que se habló de «un centro comercial, una residencia de mayores o apartamentos».
Finalmente, está confirmado que el viejo edificio ha sido adquirido por el grupo inmobiliario Peña Pelada SL, de bienes raíces, que pertenece al mexicano Ramiro Gómez Trueba, de origen cántabro. La empresa se dedica desde hace ocho años a la compraventa de inmuebles por cuenta propia, la promoción inmobiliaria, la construcción de edificios y la gestión y administración de propiedad inmobiliaria.
El antiguo Hotel Colón, situado frente a Piquío, lleva una década cerrado a cal y canto, sin ningún tipo de mantenimiento
El BOC ha publicado esta semana la solicitud de la licencia de actividad para un proyecto de hotel con seis plazas de garaje
El edificio no cuenta con ningún tipo de protección especial, por lo que se podrá hacer una nueva distribución interior
El BOC publica con fecha 19 de noviembre que sale a información pública el expediente de solicitud de licencia de actividad de hotel con garaje de seis plazas en el sótano y climatización de seis equipos con capacidad total frío de 183 kilovatios y calor de 214 kilovatios, a emplazar en Plaza de las Brisas 1. Se abre igualmente un plazo de veinte días para presentar alegaciones.
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Javier Cotera
El antiguo Hotel Colón lleva una década cerrado a cal y canto, sin ningún tipo de mantenimiento en sus cinco plantas con 32 habitaciones y una suite de cincuenta metros cuadrados. Por lo que parece evidente que las obras de reforma abarcarán una renovación integral de las instalaciones, tanto en su interior como su exterior. Su actual deterioro, unido a que es una construcción de 1920, obligarán a una importante inversión económica para su rehabilitación y posterior apertura.
La reforma que se lleve a cabo podrá redistribuir completamente el interior del hotel y retirar la escalera imperial que abre a los lados. Este nuevo diseño interior permitirá al establecimiento hotelero ganar metros cuadrados y aspirar a una mayor ocupación.
En cuanto al sótano del viejo hotel, no presentaba garaje; sin embargo, el proyecto que ha presentado Gómez Trueba incluye seis plazas de garaje, para las que hay espacio en la planta baja.
El PGOU establece que el diseño y materiales de deberá «corresponder al de una edificación acorde al carácter residencial de la zona» y ajustarse a los usos especificados para este edificio, que «no está protegido y tampoco está incluido en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico-Artístico de El Sardinero», según confirmaron los arquitectos del Ayuntamiento de Santander.
Este hotel se sumará a otras aperturas hoteleras recientes en esta misma zona, en las avenidas de Los Castros y Pontejos, como son los casos del hotel Rhin Garden, del grupo Balneario de Puente Viesgo, y Le Petit Boutique Hotel.
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