Fallece Paco Gil, gerente de la Plaza de Toros con Hormaechea

Gil aterrizó en Santander en 1981, de la mano del matador de toros cántabro 'El Norteño' y el concejal del Ayuntamiento de Santander, Javier Hinojal, al que Hormaechea había nombrado responsable de la Fundación Plaza de Toros, tras la adquisición del coso santanderino en 1979. Los empresarios taurinos, los hermanos Chopera, propietarios del edificio, habían solicitado su demolición para construir un bloque de viviendas. Hormaechea lo impidió con su compra y relanzó la Feria de Santiago que había quedado reducida a un festejo anual. Paco Gil consiguió que, en 1985, se celebraran en el ruedo de Cuatro Caminos siete festejos, y uno más año siguiente. Ya con Manuel Huerta de alcalde de la ciudad, la feria fue cogiendo una notoria popularidad en todo el país.

En 1995, Gonzalo Piñeiro relevó en la alcaldía a Huerta y puso al frente del consejo de administración de la Plaza de Toros a Constantino Álvarez, que al cabo de un año destituyó a Gil para contratar como asesor a José Manuel Martínez Uranga 'Choperita'.

Paco Gil era hijo de un prestigioso arquitecto salmantino y pronto comenzó su relación con el mundo taurino. Durante años fue apoderado de Julio Robles y de José Ignacio Sánchez, que tomó la alternativa en Santander en 1994. También representó a otros toreros como Dámaso González, Manolo Cascales, Jorge Manrique o el rejoneador Manuel Vidrié. Hombre de negocios, fue propietario de dos hoteles en Salamanca, el Gran Hotel y el Monterrey.