A por una tarde para el recuerdo

Sócrates Sánchez Lajarín y Javier Cotera

Santander

Martes, 23 de julio 2024, 20:14

Modo oscuro

Situados en el ecuador de la Feria de Santiago este martes se vivió una previa con sabor a día grande para los asistentes a la plaza de Cuatro Caminos. Una tarde calurosa donde la zona de sombra se convirtió en un gran aliado para lidiar ... con el sol lo mejor posible. Aunque muchos lo combatían en las terrazas –que estaban llenas– de los bares de la calle Jerónimo Sainz de la Maza, otros se ayudaban de abánicos, sombreros, cervezas y helados. Cualquier opción era buena para sobrellevar lo mejor posible el calor. Se podían encontrar aficionados llegados de diferentes puntos del país, incluso algunas historias de taurinos que llegaron a hacer sus pinitos el mundillo. Es el caso de José Miguel 'Marabello' Martínez, que luce con orgullo la cicatriz de una cornada de 25 centímetros de cuando era recortador, y más joven. «Es la primera vez que vengo a Santander a ver los toros, vine a la plaza hoy y repetiré mañana», explicaba este aficionado llegado desde la Comunidad Valenciana para vivir la Semana Grande.

Si hay algo que destaca en el ambiente son las tradiciones: «La bota de vino y el bocadillo del tercer toro no pueden faltar», relataban Juan Manuel Cayón y Rosario García, un matrimonio de Torrelavega que siempre acude una o dos veces a la plaza cada temporada. «El coso de Santander es algo especial, cualquier oportunidad de venir siempre es buena opción».

Para algunos fue una tarde para el recuerdo, al ser la última vez de Enrique Ponce en Santander. «Sigo al maestro Ponce desde su alternativa hace más de 30 años», contaba Manuel Valledor, de Oviedo. Un seguimiento al torero en su retirada que le va a llevar a verlo hasta en cinco plazas más: Gijón, Bilbao, Valladolid, Madrid y Valencia. «Una primera figura del toreo no se puede ir por la puerta de atrás, él es uno de los grandes y espero que acabe por todo lo alto».

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