Un fondo de inversión de EEUU construirá viviendas de lujo frente al Hotel Real

Los detalles del proyecto todavía no se conocen, pero las limitaciones urbanísticas que existen en esa zona marcaron el diseño de los arquitectos Tres Estudio hace más de dos años, cuando el potencial comprador era una cooperativa de inversores locales y lo comercializaba Élite San Fernando.

La parcela está dentro del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico-Artístico de El Sardinero aprobado en 1996. Es decir, las cinco viviendas unifamiliares que existen ya allí no se pueden demoler. Se pueden reformar, pero respetando todo lo que se pueda su estética actual. En el resto de la finca, que ahora está muy descuidada en su entrada por la calle Teniente Fuentes Pila, sí se pueden levantar nuevas edificaciones, pero solo 18 viviendas más como máximo, según las fuentes consultadas, aunque desde Aedas Homes señalan que esas limitaciones no existen.

En aquella ocasión, el proyecto -cuya infografía se puede ver en la imagen de la página siguiente- consistía en cinco viviendas unifamiliares (cuatro pareadas y una aislada) y 18 viviendas en dos bloques de cuatro pisos de altura. Todos ellos tenían garaje propio y se podía escoger entre cuatro bajos con jardines privados, dos áticos rodeados de terrazas o doce pisos con vistas al Sur. A esta futura urbanización se la bautizó entonces como Residencial Los Tilos, pero los nuevos propietarios han cambiado el nombre del proyecto: Galdia.

A todos esos detalles del anterior diseño, Aedas Homes añade ahora piscinas particulares, la posibilidad de separar los chalets pareados y, como reclamo, que Santander «contará con AVE directo con Madrid en poco menos de 3 horas».

La historia de la finca se remonta a los años 40, cuando el fundador de Laboratorios Alter, Miguel Ángel Alonso, compró el terreno para construir allí los cinco chalets que aún siguen en pie como residencia de verano para su familia. Tras su fallecimiento, la propiedad de la parcela pasó a cinco familias del apellido Alonso, algunas de las cuales siguen veraneando con frecuencia en Santander, aunque no en esas viviendas, que se encuentran en estado de abandono.

Los herederos llevan dos décadas intentando vender la parcela con distinto precio. En los años de la burbuja del ladrillo, en los inicios de siglo, se ofertaba por cerca de 24 millones de euros, y hubo empresas que llegaron a pagar por opciones de compra que acabaron en nada. La última vez que la finca estuvo a punto de cambiar de manos fue hace un par de años, cuando una cooperativa de inversores locales estuvo a punto de cerrar el trato, pero las limitaciones urbanísticas dieron al traste con la operación por la baja rentabilidad.

Aedas Homes es una de las grandes promotoras de vivienda de España. Junto a Metrovacesa y Neinor son las tres mayores que cotizan en el mercado español. La empresa se estrenó en Bolsa en 2017 impulsada por el fondo de inversión norteamericano Castlelake, que se hizo con el 79% de la propiedad de la inmobiliaria.

La promotora, con sede en Madrid, ha entregado 922 viviendas entre abril y septiembre del año pasado. En total, la compañía ha entregado más de 13.000 viviendas, prácticamente, en toda España. En Cantabria, la inmobiliaria debutó en 2023 en Laredo con el proyecto Noray, formado por 106 viviendas de lujo y situadas en pleno centro del municipio, a un paso de la playa y del puerto deportivo. Su entrega está prevista en la primera mitad de 2026.

A pesar de estas cifras de negocio, el futuro de Aedas Homes está en el aire, ya que Castlelake parece decidido a vender su participación mayoritaria en la promotora residencial. El fondo estadounidense ha fichado a Deutsche Bank para encontrar un comprador del 79% del capital que controla -valorado en 870 millones de euros- y, a su vez, la propia Aedas ha fichado a Goldman Sachs para posicionarse también sobre esta operación, que debería realizarse mediante una opa.