El Gobierno abordará dentro de diez días la situación de los policías en prácticas

«Estamos ante un caso sin precedentes en ningún otro ayuntamiento de España», subrayó Ortiz, y a pesar de que «el Ayuntamiento no nos ha solicitado formalmente la convocatoria de la mesa, sino que nos hemos enterado por la prensa», el Gobierno regional ya ha activado la maquinaria para tramitar los informes necesarios que aclaren cómo se ha desarrollado el proceso y por qué se tomó una decisión que «está fuera de toda normativa».

Para justificar la entrega de armas, el jefe en funciones, Gustavo Zabala, argumentó que la propia Policía de Santander les había impartido un curso a los prácticos. La Guardia Civil calificó la decisión de «irreflexiva» y la Abogacía General del Estado desmontó sus alegaciones. En el cruce de documentos entre instituciones -que culminó hace unos días con la retirada de las pistolas Smith and Weeson a los nuevos agentes-, destaca uno de los argumentos de Zabala, que recordó que, en España, «estamos en nivel 4 de alerta antiterrorista por posibles atentados».

Desde la Dirección General de Justicia del Gobierno de Cantabria se explicó que el objetivo de la mesa es «aclarar la situación en el resto de municipios» porque lo ocurrido en el Ayuntamiento de la capital cántabra «repercute en el resto de consistorios de la región».

Respecto a la justificación presentada por Zabala sobre la alerta antiterrorista, Ortiz opinó que «la amenaza es real, pero la normativa no contempla policía en prácticas con armas en ningún sitio de España».

Tras una semana en la que se estudiará la información del proceso, se reunirá la Mesa de Coordinación, cuyo trabajo consistirá en «poner en común criterios para homogeneizar los procesos de selección de la Policía en toda la región». En este sentido, Ortiz opinó que el futuro podría pasar por «centralizar esta competencia. Así se hace ya en muchas comunidades en las que la selección de los procesos de policías no depende de los ayuntamientos». Con esta medida «se podría reducir el tiempo de espera entre la fase de oposición y la convocatoria de los cursos». Respecto a estos cursos, cuyo contenido es de 350 horas, Ortiz informó de que en 2015 se celebraron dos y que en el próximo mes de septiembre tendrá lugar otro.

UGT, el sindicato mayoritario en el Ayuntamiento de Santander, aseguró este miércoles que una de sus primeras reivindicaciones al nuevo equipo de gobierno municipal será la cobertura definitiva de la Jefatura de la Policía Local, además de medidas para modernizar el Cuerpo. Recuerdan que la jefatura, en este momento, es ejercida de manera temporal por asignación de funciones y rechaza la decisión del actual responsable de la Policía Local de entregar armas a 15 agentes en prácticas lo que, en su opinión, «además de perjudicar la imagen del Cuerpo, podía haber acarreado gravísimas consecuencias». A su juicio, se trata de «un ejemplo más de su manera de ejercer la jefatura».

Según el sindicato, el jefe de la Policía Local decidió «de manera unilateral, sin consultar la legalidad de su decisión y limitándose a informar de ella a posteriori» la entrega de armas a agentes en prácticas tras un curso de tiro de sólo seis horas. El sindicato señala que esta decisión contraviene el criterio seguido hasta ahora ya que, según asegura, «nunca se había procedido a la entrega de armas antes de finalizar el preceptivo Curso Básico de la Escuela Autonómica de Policía Local, que culmina el proceso selectivo de estos funcionarios». También transmite «todo su apoyo a los compañeros afectados» y advierte de que velará «para que no se les ordene ocupar puestos de seguridad, con funciones como vigilancia y custodia de edificios e instalaciones municipales o el control de acceso, cuyo desempeño exige portar armas».

UGT insiste además en la necesidad de que el nuevo equipo de gobierno municipal afronte «la necesaria modernización de la Policía Local» y recuerda que desde hace tiempo ha exigido y apoyado una serie de medidas con ese objetivo, relativas a las instalaciones, las armas, los vestuarios y «otras cuestiones de especial importancia». También denuncia «anacronismos» como la ausencia de protocolos escritos, que después de «más de 125 años de existencia», la Policía Local de Santander no tenga las especialidades de tráfico, seguridad ciudadana o atestados, que no haya un programa específico de reciclaje y formación o que no se disponga de una aplicación informática para optimizar los recursos materiales y humanos. Critica igualmente la «incongruencia» de que más de 200 policías tengan que compartir 30 chalecos antibalas o que no se haya subsanado aún el mal funcionamiento de las emisoras de radio. También extiende sus críticas al Gobierno de Cantabria, al que todos los sindicatos acusaron en enero de este año de «no apostar por el Cuerpo».