Secciones
Servicios
Destacamos
Consuelo de la peña
Santander
Martes, 1 de octubre 2019
El artista y DJ David Guetta será juzgado en Santander por los daños y perjuicios causados con su incomparecencia en el concierto que tenía previsto ofrecer el 8 de julio de 2018 en la ciudada como broche final del Festival de Música de la ... Semana Grande. Delfuego Booking, la sociedad que contrató la actuación musical del francés, en concurso de acreedores tras el fiasco artístico, demandará al productor discográfico por incumplimiento «grave» de contrato al no acudir a la representación comprometida, y exigirá una indemnización superior al millón de euros.
El éxito de la demanda constituye la única garantía de cobro para los miles de consumidores afectados que compraron una entrada y se quedaron sin concierto, así como para el resto de los acreedores.
La suspensión del concierto no solo dejó con las ganas y el bolsillo vacío más de 7.000 fans, sino que tuvo un efecto devastador para las empresas organizadoras. Delfuego Booking y la mercantil madrileña Heart of Gold, integrantes ambas de la Unión Temporal de Empresas (UTE) La Campa con la que se hicieron cargo del festival veraniego, se declararon en suspensión de pagos y se encuentran en situación de insolvencia. Delfuego Booking tuvo que ceder sus derechos sobre la gestión de Escenario Santander, un centro de creación y producción musical que es concesión municipal.
Ante esta situación, la mercantil se propuso demandar a Guetta por incumplimiento de contrato, pero se encontró con las manos atadas por una cláusula arbitral incluida en el contrato, en virtud de la cual cualquier disputa o contienda que surja o el incumplimiento del mismo, se debían resolverse mediante arbitraje en Inglaterra, cuya sede de celebración es la Corte de Londres.
Pleitear en la ciudad del Támesis es especialmente costoso y está plagado de incertidumbres, por lo que el abogado de la sociedad concursada, Vicente González, solicitó al juez de lo Mercantil la suspensión de cláusula arbitral, a fin de que la contienda se sustancie ante un juzgado civil de Santander, que es el lugar donde se produjo el incumplimiento.
Este martes, el magistrado Carlos de Marigorta estimó íntegramente la petición dada la singularidad de la materia controvertida y ha dejado sin efecto la cláusula arbitral, una decisión que no tiene precedentes en España.
En el auto judicial, el juez subraya que acudir al arbitraje internacional conlleva unos «costes inasumibles» para una empresa en concurso de acreedores, sin tesoría y sin apenas masa activa masa, y cuyo único activo es precisamente el crédito frente al artista. Valora además que la única posibilidad de que los múltiples acreedores (entre ellos, más de 7.000 consumidores que compraron entrada) recuperen su dinero «pasa por el éxito» de la reclamación judicial de Delfuego Booking frente al dj francés por incumplimiento de contrato. Y en este sentido sostiene que esa reclamación «es inviable por su coste» si no se suspende la cláusula arbitral.
Aunque la resolución judicial conocida hoy puede recurrirse ante la Audiencia de Cantabria (David Guetta ha sido declarado en rebeldía en el procedimiento concursal), ello no impide que «de manera inmediata» el abogado de Delfuego Booking presente la demanda civil contra el artista parisino en un juzgado de Santander. Según ha sabido este periódico de fuentes conocedoras del caso, la mercantil exigirá al productor discográfico una indemnización superior al millón de euros por los daños y perjuicios causados, entre los que cuantifica 500.000 euros de entradas, el reintegro del caché que está pendiente (Guetta devolvió 250.000 euros) y otros perjuicios directos e indirectos generados.
De tener éxito la reclamación, esa cantidad irá a parar en su totalidad al proceso concursal y servirá para devolver el coste de las entradas y para pagar al resto de los acreedores. Lo que quedé después de esta liquidación irá a parar a los socios de las empresas quebradas.
El abogado de Delfuego Booking cree que existen muchas posibilidades de que la demanda tenga éxito, porque la responsabilidad del artista es «incontrovertible. Alguien que no tiene responsabilidad alguna no devuelve 250.000 euros», señala. Por eso, el nudo gordiano del proceso judicial será determinar la cuantía de la indemnización.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.