Un incendio de maleza en La Remonta ha amenazado a una urbanización de Campogiro

En La Remonta, según explicaron residentes del vecindario, el fuego se originó en unos matorrales, pero se extendió también al tendido eléctrico que se encuentra junto a la citada urbanización. Un momento que los vecinos vivieron con gran preocupación ya que, indicaron, los bomberos tardaron en llegar debido, precisamente, por la coincidencia de sucesos a la misma hora. «Hemos estado esperando bastante a que vinieran y empezaran a actuar», aseguraron testigos del incendio de La Remonta. Quienes sí llegaron a la zona en cuanto recibieron el aviso fueron varios efectivos de la Policía Local de Santander. Además, hasta el lugar se desplazó personal de Adif porque el fuego amenazaba con llegar a la catenaria del tren que pasa junto a la zona.

Ya con los bomberos en la zona, tras varias horas de trabajo y con un autotanque desplazado, sobre las dos de la madrugada, y en medio de la preocupación vecinal, el incendio se dio por controlado (si bien a lo largo del día se vigiló la zona para que las llamas no volvieran a ‘brotar’).

El mal estado del parque ha sido una queja que los propios vecinos han hecho llegar ya al Ayuntamiento de Santander, preocupados por lo que pudiera pasar. «He ido personalmente en numerosas ocasiones a denunciar el estado de abandono y nadie hace caso», reclama María Teresa Puente, residente en Las Californias, la urbanización que se vio amenazada por el incendio. «Tomarán medidas cuando haya una desgracia y ayer estuvo a punto de haberla», lamentaba a primera hora de la mañana tras una noche de sustos.

La finca de La Remonta es propiedad del Ministerio de Defensa desde 1919 y antes antes finca del conde de Campogiro. Desde 2017 los ciudadanos pueden pasear por un camino de 900 metros de longitud fruto de un acuerdo alcanzado con el Ministerio en 2015 y una inversión municipal de 500.000 euros.

Hace unas semanas, consultado por este periódico, el concejal de Fomento en el Consistorio, César Díaz, utilizó el mismo término que la vecina para referirse, en ese caso, a las edificaciones militares ubicadas en la zona más alta y que también están «abandonadas». La previsión para la finca es la de hacer un gran parque, un «pulmón verde».