El juez ratifica la prisión provisional para los dos detenidos por el incendio de El Alisal

La declaración de esta testigo tira por tierra el alegato de uno de los sospechosos, que en una carta enviada a este periódico negaba todos los hechos. Fue un escrito firmado desde el penal de El Dueso de Santoña y que venía firmado como 'Guillaume': «Soy totalmente inocente, es una vil equivocación y una mala ilación de la investigación policial. Además, en esa comunidad de vecinos no conozco absolutamente a nadie con quien pudiera tener represalias de ningún tipo», argumentaba.

Lo cierto es que son varios los residentes en la urbanización que han tenido acceso a las imágenes de las cámaras de seguridad, y que confirmaron hace semanas que «solo con verlos moverse, con verlos caminar, ya sabemos quienes son». Pero el instructor quería confirmar la identificación en persona, por lo que organizó una rueda de reconocimiento con la principal testigo, que ratificó ayer la identidad de los sospechosos, tanto al que denominan 'el sirena', y que es popular en el barrio, como al remitente de la carta desde la prisión.

La investigación policial se apoya en más datos. Hay otras cámaras de seguridad de negocios de la zona que los captaron momentos antes de acceder al garaje e incluso entrando en el subterráneo; y la geolocalización de sus teléfonos móviles no deja duda de que estaban allí, en ese momento preciso. Todo ello pesó en las diligencias que practicó la Brigada Provincial de Policía Científica, con el apoyo de especialistas llegados de Madrid, hasta dar con los supuestos autores del incendio, que fueron detenidos en Bezana y Pechón.

Los vecinos afectados por el incendio, que se enfrentan ahora a una derrama para sufragar la obra de reparación de los garajes, que costará 170.000 euros, están luchando con la burocracia para tratar de agilizar el cobro de los seguros. Sobre todo aquellos que vieron cómo el fuego afectaba a sus vehículos.