Medio centenar de voluntarios hacen visible el Domund en Santander

Rodríguez ha explicado que, si bien la recaudación que se logra este día «resuelve mucho», lo fundamental es que la gente no se olvide de qué significa el Domund. «Todos responden bien en la calle con sus aportaciones. Pero para nosotros es casi más importante que se siga visibilizando que las misiones siguen en marcha y que las podemos ayudar desde aquí con donaciones». Porque -ha subrayado- el Domund «no gasta ni un céntimo en propaganda» al cabo del año y «la única forma que tenemos de recordar que hace falta apoyo es con esta jornada».

Justamente con este objetivo (la visibilización), en Cantabria se hicieron hace años unos chalecos que son utilizados por los voluntarios para salir debidamente identificados a recorrer las calles. Este día, el medio centenar de colaboradores que se ha situado en lugares estratégicos de la ciudad ha constatado que los santanderinos están «muy concienciados» con la labor de las misiones, ha señalado Rodríguez, quien se ha congratulado, además, de que hoy «el buen tiempo acompañó, aunque nosotros salimos en la fecha aunque llueva, que en Cantabria nos llueve en muchas ocasiones».

En estos momentos hay 71 misioneros trabajando por los más necesitados en los lugares más pobres de la tierra (11 menos que el año pasado). Entre ellos destaca el sacerdote José Manuel Ballesteros, un médico natural de Rubayo -que desarrolla su tarea en Camerún- y que justamente se encuentra en Cantabria para poner de relieve la labor del Domund. Ballesteros llevaba cuatro años sin salir de África.