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El bidón azul caído al mar desde un barco sigue encallado en la costa de la Virgen del Mar diez días después de que los vecinos lo vieran por primera vez golpeándose contra las rocas en esta zona de Santander. Continúan, desde el viernes ... 24 de noviembre, dando aviso a las autoridades pidiendo que se retire, ante el temor de que pueda romperse y derramar su contenido, sin que de momento nadie se haga cargo del problema y unas administraciones digan que compete a las otras.
No se sabe qué tiene dentro, aunque las pesquisas realizadas por particulares preocupados van dando alguna pista sobre lo que podría contener el misterioso bidón azul. Han averiguado que el titular del recipiente es la empresa holandesa Marine Care (el nombre figura en los tapones), que se dedica a la gestión de residuos de limpieza de los barcos, que ha respondido a un correo enviado por el colectivo cántabro Valdearenas Limpia confirmando que es el dueño y recomendando, además, que se proceda a su retirada con sumo cuidado.
Tampoco Marine Care sabe qué hay exactamente dentro de este bidón en concreto, porque faltaría la etiqueta del producto, pero, pese a ello, pide que se extremen las precauciones: «En primer lugar, informe a las autoridades locales pertinentes para que les orienten sobre la retirada y eliminación segura de los bidones y su contenido. Le recomendaré encarecidamente que tome todas las medidas de precaución y seguridad», según consta en el correo electrónico enviado por la empresa holandesa a la asociación Valdearenas Limpia.
Este colectivo vecinal, muy activo en la difusión en redes sociales de todos los tipos de residuos que llegan a las playas de Cantabria, desde Piélagos hasta Santander, se ha puesto en contacto con este periódico, como ya lo hiciera un vecino la semana pasada, para tratar de que alguien se haga cargo de la correcta gestión de este bidón. «El Seprona nos dice que la limpieza de las playas compete al Ayuntamiento, pero por nuestra experiencia con otros residuos semejantes que han aparecido en la costa, las autoridades locales no saben qué hacer ni cómo actuar», indican desde Valdearenas Limpia. Esta asociación considera necesario que el Gobierno de Cantabria impulse un protocolo que marque la manera de proceder en casos así. Mientras tanto, el bidón azul sigue entre las piedras, sometido a los rigores del invierno; intacto de momento, aunque puede que no por mucho tiempo...
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