

Secciones
Servicios
Destacamos
La densa niebla que cubre Santander desde primera hora de la mañana ha obligado a desviar dos vuelos, el procedente de Barcelona, que ha ... tenido que aterrizar en Bilbao, y el de Palma de Mallorca que, tras varias esperas, finalmente ha puesto rumbo a Madrid.
El aparato de Vueling procedente de Cataluña tenía que aterrizar en el Seve Ballesteros a las 7.50 horas y despegar de regreso a las 8.30 horas, que tampoco ha sido posible porque el avión se encuentra en Bilbao y los pasajeros rumbo a Loiu en dos autobuses para volar desde allí.
Dos autobuses han llegado esta mañana al Seve Ballesteros con los pasajeros que han tenido que ser desviados hasta el aeropuerto de Bilbao: «Hemos dado unos cuantos rodeos durante media hora, y tras dos intentos de aterrizaje, al final nos han comunicado que nos íbamos al aeropuerto de Bilbao porque era imposible aterrizar en Camargo con la niebla que había a primera hora», explicaba a este periódico Sergio López tras bajar del autobús que llegaba desde la capital vizcaína.
Unos minutos después llegaban en el segundo vehículo de refuerzo Susan Aranda y su hija Marina: «Estamos agotadas, el avión ha salido a las seis y media de la mañana, pero llevamos desde las cuatro y media despiertas», aseguraban tras su periplo desde Barcelona para pasar unos días en la casa familiar de Cantabria.
La niebla ha dificultado el aterrizaje de un segundo avión, el Ryanair procedente de Palma de Mallorca que, tras varias vueltas por la zona de Peñacastillo, finalmente ha tenido que poner rumbo a Madrid. Los pasajeros han permanecido en el aeropuerto Seve Ballesteros hasta apróximadamente las doce del mediodía, cuando el avión desviado hacia Madrid ha podido regresar a Cantabria para partir hacia Palma de Mallorca.
El santanderino Alejandro Zubeldia es uno de los pasajeros que se encontraba esta mañana en el Seve Ballesteros a la espera de poder volar hacia el archipiélago balear. Sentado en el suelo, junto a otros cuatro amigos, ha contado a este periódico cómo se han enterado del retraso de su vuelo para disfrutar de unos días de playa en Porto Cristo: «No nos han avisado, hemos estado esperando más de media hora y de repente, por megafonía, han dicho que el avión se había desviado a Madrid por causas meteorológicas», explica.
«Tarde y mal», añade su amiga, Estíbaliz Fernández, quien aseguraba que estaba previsto que despegasen a las 11 de la mañana —finalmente ha sido pasadas las doce— aunque «no lo han dicho muy convencidos, ya veremos a qué hora acabamos saliendo», señalaba con aparente enfado.
«Ayer tuvimos que levantarnos a las siete de la mañana para hacernos la prueba PCR o antígenos que piden, mucha exigencia, pero después nos han dejado a todos dentro del aeropuerto colapsados hasta que hemos preguntado si podíamos salir», añade Fernández.
✈ Y luego vendrán criticando a @Ryanair_ES ‼️
Amigos de Parayas (@AParayas) July 20, 2021
Ahí tenéis las esperas que está haciendo el #Boeing 737 de @Ryanair_ES matrícula EI-DCP procedente de #Mallorca sobre el #SeveBallesterosSantander
Unas tienen la fama y otras.... pic.twitter.com/5g6DFTbrvI
El avión que sí ha podido tomar tierra esta mañana en el aeropuerto Seve Ballesteros ha sido el Air Nostrum procedente de Madrid, que desplegaba sus ruedas en Santander con doce minutos de retraso, a las 9.02 horas.
El vuelo de Volotea procedente de Menorca ha aterrizado sin problemas en el Seve Ballesteros a su hora prevista, las diez de la mañana. «Hemos llegado incluso unos minutos antes» contaba uno de los pasajeros tras abandonar el aeropuerto.
El fenómeno que este martes ha cubierto la costa de Cantabria con un denso manto blanco es conocido como nieblas de advección. Después de días de viento nordeste, el aire cálido y húmedo se mueve sobre el mar, con aguas frías a menor temperatura tras el afloramiento del fondo del mar, lo que da lugar a esta densa niebla sobre el mar Cantábrico.
Según el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), José Luis Arteche, estas nieblas son «raras», se producen sobre el mar y suelen durar «bastante tiempo». Son muy características en el mes de junio y suelen presentarse especialmente en las rías gallegas y la costa portuguesa. Este fenómeno no es tan habitual en Cantabria pasado el mes de junio, es más complicado encontrar este espeso manto en algunos puntos en los que el mes pasado se observaba con más frecuencia, como el Cabo Mayor.
En meteorología son distintas a las conocidas como nieblas de irradiación, características de la meseta castellana, en lugares como Madrid, Valladolid y Salamanca, que se forman cuando por el enfriamiento del suelo durante la madrugada y que desaparecen con las horas centrales del día, las más soleadas. En cambio, estas nieblas sobre el mar se pueden suavizar durante el mediodía, pero en muchas ocasiones, persisten durante «prácticamente todo el día».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias seleccionadas
Ana del Castillo
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.