Nuevo ácido cruce de acusaciones entre el PSOE y el PP por la jefatura del servicio de Vialidad

El portavoz del Grupo PSOE Daniel Fernández ha refrendado sus declaraciones sobre el proceso «plagado de irregularidades» que se ha seguido para cubrir la plaza, que es, ha dicho, un «traje a medida» para colocar a un «hombre de confianza» del Partido Popular en un servicio que «es clave» en el funcionamiento del Ayuntamiento, en lo que en su opinión constituye «un auténtico y lamentable escándalo de nepotismo del Partido Popular».

Fernández ha recordado que hace unos días denunció que el nombramiento del jefe de Vialidad estaba «bajo sospecha» tras un concurso de méritos abierto a toda España que ha sido «excepcional, anómalo» y con carácter «urgente», y con el candidato mejor puntuado «muy vinculado» al Partido Popular. Y «nadie, ni la alcaldesa, ni el concejal de Obras, ni el de Persona, nadie en el PP, ha rebatido esta evidencia», ha subrayado el socialista.

Tras esta denuncia, Igual, «en unas declaraciones plagadas de mentiras», retó a Fernández a volver sobre sus palabras tras ver el expediente, y hoy el concejal se ha reafirmado: a sus ojos, es «un dedazo en el servicio sobre el que pivotan las adjudicaciones de obra, con más de cuatro millones de euros en sobrecostes en lo que llevamos de legislatura».

Un servicio que va a tener, 20 años después, una jefatura «muy alejada de la imparcialidad que se presupone a un funcionario público», ha lamentado Fernández, que también ha reiterado que el ganador es «una persona de confianza del Partido Popular, que ha ocupado distintos organismos en Ceuta, siempre a dedo. Y una persona con evidentes lazos con el mando político, que es el concejal de Obras del Partido Popular en el Ayuntamiento de Santander», en alusión a César Díaz.

Respecto a las «mentiras» del PP, Fernández ha recordado que este partido afirmó que «la valoración de los méritos de los candidatos la realizan funcionarios municipales», lo que es «absolutamente mentira», ha asegurado, puesto que «ha ocultado la participación, en el tribunal que adjudica la plaza de jefe de Vialidad, de un cargo político designado a dedo por el PP».

En este sentido, ha explicado que el director general ha intervenido en el concurso de méritos a la hora de evaluar la memoria y la entrevista, y tras su intervención, se produjo «un vuelco» en el orden de los aspirantes: los dos candidatos con mejor nota en los méritos generales, «en la parte objetiva», suspendieron, y el que ocupaba la sexta posición de siete candidatos pasó a ser el primero, ha relatado.

Según los socialistas, el director general entra en las reuniones de la Comisión de Valoración «a condicionar totalmente el criterio de cuatro miembros del jurado que no tienen conocimiento en la materia porque no son ingenieros».

Entonces, «los candidatos que tienen más méritos suspenden en la parte subjetiva y quedan eliminados. Y el que tiene menos méritos, saca un 10 en la parte subjetiva y se queda con la plaza. ¿Esto es mérito?. ¿Esto es capacidad?. ¿Igualdad?. ¿Transparencia?. No, esto es un proceso totalmente irregular», ha censurado Fernández.

La «segunda gran mentira del PP», ya desmentida por los sindicatos, es que la provisión contó con el apoyo de éstos, cuando en realidad «se opusieron frontalmente a la forma de provisión de este puesto». Además, según el PSOE, el Partido Popular no ha justificado la urgencia ni la necesidad de cubrir esta plaza, que lleva dos décadas sin titular.

Fernández ha pedido a Díaz «que deje de esconderse detrás de Pedro Nalda (concejal de Personal) y que ofrezca sus primeras explicaciones» sobre «la intervención de su director general, nombrado a dedo por él, en este concurso de méritos» y sobre «cómo un candidato que era el penúltimo en la parte objetiva pasa a ser el primero tras la evaluación subjetiva». Igualmente, le pide que explique la relación que une al candidato ganador con el Partido Popular desde los años de Ceuta; y la que le une a él mismo con el aspirante, pues fueron «compañeros de pupitre, misma promoción, números consecutivos de colegiación».

Explicaciones que ha hecho extensivas a la alcaldesa, a la que también ha pedido que rectifique públicamente «por mentir tan descaradamente en público. Pero sobre todo por este proceso tan irregular».

El concejal de Personal de Santander, Pedro Nalda (PP), ha insistido este lunes en que «no existe irregularidad alguna» en el proceso para la provisión de la plaza de jefe de servicio de Vialidad, que ha sido «el habitual» y se ha desarrollado «con total garantía y transparencia». La Comisión de Valoración -ha recalcado- ha estado formada «exclusivamente por funcionarios municipales de carrera».

En un comunicado, Nalda ha acusado a los socialistas de «seguir mintiendo para continuar con la maniobra iniciada de abrir camino a la prima carnal de uno de sus concejales» en el puesto.

«Ya han visto el expediente, conocen que todo está en orden y que no hay irregularidad alguna», ha remarcado Nalda, que ha explicado que la segunda clasificada en el proceso -familiar del concejal socialista Javier González de Riancho-, estaba en el último puesto en la fase de méritos generales y ascendió al segundo en la puntuación que, «según el PSOE es subjetiva, la de méritos específicos (compuesta por la memoria, entrevista y méritos adicionales)».

Además, con relación a las acusaciones del PSOE de que el director general de Fomento, «nombrado a dedo por el concejal de Fomento», ha tenido «una participación decisiva» en la fase de valoración de los criterios subjetivos de los candidatos, Nalda ha aclarado que su participación «se limita a asesorar a los miembros de la Comisión -exclusivamente funcionarios- en todo aquello que consideren necesario».

De hecho, ha afirmado, así figura expresamente reflejado en las bases generales consensuadas con los sindicatos para la provisión de puestos mediante el concurso de méritos, como es el caso. De esta forma, en el punto séptimo de las bases se dice que «Las Comisiones de Valoración podrán solicitar de la autoridad convocante la designación de expertos que en calidad de asesores actuarán con voz pero sin voto».