El nuevo contrato de Parques y Jardines: menos podas, más biodiversidad y productos sostenibles

Hasta ahora, todas las zonas verdes y árboles de Santander recibían el mismo trato. A partir del nuevo contrato, se actuará según las características de cara área: parques, calles con árboles, jardines verticales... Así hasta doce tipos de espacios. Para definirlos, el Ayuntamiento se ha basado en tres criterios: la estructura, el uso social y los requisitos de mantenimiento. Porque no requiere los mismos cuidados una zona verde que sólo tiene césped a otra con arbustos. O un área en la que se puede hacer deporte a otra que no se puede pisar.

12,7millones al año es el presupuesto de licitación de los trabajos

El cuidado de los jardines irá más allá de ocuparse de las especies que ya hay y fomentará la biodiversidad. Para lograr este objetivo, se diseñarán nuevos espacios verdes en los que se incorporen elementos que proporcionen refugio a las especies silvestres y se introducirán medidas para favorecerlas, como la repoblación de especies autóctonas y la recuperación de humedales que protejan sus hábitats. También se reducirán las siegas para que las especies proliferen y se advertirá, a través de carteles, de que es una decisión premeditada para que los ciudadanos no piensen que se trata de abandono y dejadez. Además, se crearán pequeñas zonas de protección, dentro de los grandes parques, en los que se trabajará esa promoción de la biodiversidad y se potenciará la presencia de especies autóctonas y beneficiosas para la sociedad y, a la vez, se luchará contra las invasoras y exóticas, «que no sólo no aportan valor, sino que tienen un impacto negativo sobre el bienestar humano», rezan los pliegos del nuevo contrato, que se prolongará hasta 2026 y podrá ampliarse a 2027.

Además de las siegas, también se reducirán las podas. Durante años, estos cortes en las ramas de los árboles se han realizado anualmente sin tener en cuenta las necesidades de cada especie ni del lugar donde crecían. Tras la puesta en marcha del nuevo pliego, estas actuaciones se llevarán a cabo de forma mucho más especializada. Así, la poda se realizará teniendo en cuenta varios factores: la situación de cada ejemplar, el estado del arbolado, la seguridad de los ciudadanos y otras causas que pudieran producirse.

12tipos de trabajos según las necesidades: parques, calles con árboles, jardines...

Los objetivos de esta nueva forma de trabajar serán conseguir el mejor desarrollo de cada ejemplar y mejorar su salud, formar correctamente los árboles y reequilibrar sus copas, eliminar el peligro de caída y la aparición de plagas o enfermedades y cortar ramas vivas sólo cuando esté justificado para minimizar los problemas de desarrollo de cada planta. Esta labor se realizará siempre en la época más adecuada, quedando supeditada a lo señalado por el Servicio Técnico Municipal para cada especie, lugar y circunstancia y sometiéndose siempre a unas normas de carácter general.

Otra de las novedades que traerá el nuevo contrato es la reducción de la contaminación atmosférica. Así, la maquinaria y el material móvil deberán emitir bajos niveles de ruidos y gases contaminantes. En todo momento, se debe garantizar que las máquinas no superen dichos niveles y los motores sólo podrán estar en funcionamiento el tiempo «estrictamente necesario» para el desarrollo de la actividad. «Habrá que detener el motor de los vehículos cuando estos puedan estar parados más de tres minutos», recoge literalmente el documento de los pliegos. Tampoco se podrán realizar labores que generen «ambientes pulverulentos» cuando haya fuerte viento.

Los productos que se usen para el cuidado de las zonas verdes, como los fertilizantes, serán más sostenibles a partir del nuevo contrato. Así, los pliegos contemplan que se potencie la compra de artículos con ecoetiquetas y distintivos ecológicos. También tendrán que ser productos de baja toxicidad para el medio ambiente y con bajas emisiones tóxicas y corrosivas. Pero irá más allá, ya que también tendrá que ser sostenible -bajo la Etiqueta Ecológica Europea o equivalente- el aceite que se utilice para lubricar los motores, las cadenas y los sistemas de los vehículos.

En cuanto a los propios vehículos, todos los que se pongan a disposición del servicio tendrán que ser nuevos y no se admitirá ninguno que se haya usado aunque sea durante poco tiempo ni tampoco los de kilómetro cero. Además, los más grandes -más de 3.500 kilos- tendrán que disponer de etiqueta ambiental CERO o ECO y, los pequeños, podrán tener estas mismas etiquetas y también la C.

Aunque el contrato está en licitación y lo lógico es que el presupuesto baje en función de las ofertas que se presenten, sí se contempla que se pague más a la nueva concesionaria que a la que trabaja ahora. Esto se debe a que los parques y jardines de la ciudad son más numerosos ahora que cuando se llegó al acuerdo anterior, en 2012. Actualmente, una década después, Santander tiene un 30% más de zonas verdes que suman casi 4 millones de metros cuadrados. Ese incremento de jardines traerá también consigo un aumento de 45 trabajadores más en la plantilla.