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La Guardia Civil, con la colaboración de inspectores de Pesca de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, ha intervenido más de 160 kilos de merluza y chicharro que estaban siendo descargados de un camión en Santander.
Con motivo de la campaña de vigilancia de la costera de la caballa, se están llevando a cabo una serie de actuaciones con el fin de controlar, entre otras, el origen y destino del pescado que llega al consumidor.
En una de estas actuaciones, el pasado 6 de abril, los agentes observaron junto a un camión que descargaba caballa en un punto de distribución de Santander, un palé con cajas de pescado de distintas especies. Tras hablar con el conductor de la furgoneta, comprobaron que la mercancía no tenía etiquetado ni justificante de compra.
Durante el registro, la Guardia Civil encontró 12 cajas, una de ellas con 15,5 kilos de merluza y el resto con 147 de chicharo. Por este motivo, los agentes redactaron dos denuncias a la empresa responsable de la mercancía, una por no presentar documento alguno de estas capturas, las cuales fueron intervenidas y entregadas al Banco de Alimentos, y otra por no mostrar el etiquetado necesario.
Dos días antes, la Guardia Civil había 'pescado' a dos mariscadores en el paraje conocido como playa de Santa Justa perteneciente a Santillana del Mar, con 12 kilos de percebes y sin ningún tipo de autorización para la actividad.
Por este motivo, se les instruyó diligencias en calidad de investigados como presuntos autores de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos.
Las capturas fueron decomisadas y entregadas a un centro benéfico de Torrelavega.
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