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En Cueto crece desde hace tres semanas la «intranquilidad» y la «preocupación». Muchos vecinos temen ser los próximos en sufrir un robo en su vivienda porque en las últimas tres semanas los ladrones han entrado en al menos 12 casas unifamiliares y pisos de la ... zona. El botín es siempre el mismo: joyas, dinero y «todo lo que pueden vender luego bien en el mercado negro», aseguran fuentes policiales. Las mismas que aseguran que se trata de un grupo itinerante de delincuentes profesionales. La alcaldesa de Santander, Gema Igual y la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones, se reunieron ayer de forma extraordinaria para tratar el problema y solicitaron a los vecinos la colaboración ciudadana para «garantizar la efectividad del dispositivo policial».
Primero, porque es «fundamental que la gente colabore y avise a los agentes ante la mínima sospecha», resolvió Quiñones. Y para ello indicó un correo electrónico (santander.participación@policia.es) y un teléfono (942 35 90 85).
Segundo, porque «es clave que nadie comparta información sensible en redes sociales, sobre todo aquella que pueda serle útil a los ladrones». Hay personas que han estado informando de los dispositivos de vigilancia de los ladrones, de la información que les ha facilitado la Policía y hasta de las zonas que podrían ser más susceptibles de sufrir robos «por encontrarse con poca luz, por ejemplo».
Todo ello se comentó ayer en la Junta de Seguridad Ciudanana extraordinaria que se celebró para poner en común la labor de la Policía Local y la Nacional. Una reunión donde se recordó «la ilegalidad» que supone la conformación de patrullas vecinales, tal y como era la intención de algún residente. «No podemos poner en marcha iniciativas individuales», recordó la jefa superior de la Policía Nacional, Carmen Martínez. En otros barrios como en Nueva Montaña, donde hace unos meses también sufrieron una importante oleada de robos –incluso con fuerza en algunos de los casos– los vecinos activaron grupos de vigilancia a través de las redes sociales; pero no es legal conformar patrullas. Para eso ya están los agentes, que han reforzado la vigilancia en la zona con un dispositivo permanente de varias patrullas.
En la política municipal de Santander Ainoa Quiñones y Gema Igual protagonizaron sus primeros choques. Y en los últimos tiempos esos enfrentamientos dialécticos se han reeditado por causas diferentes: la retirada de los diques de La Magdalena;los controles de seguridad en los últimos partidos del Racing de Santander, cuando se produjeron disturbios en El Sardinero, etc. Todo eso quedó ayer apartado para trabajar de forma conjunta y constructiva para poner freno a la oleada de robos en viviendas de Cueto. Policía Nacional –dependiente de la Delegación del Gobierno– y Policía Nacional –de competencia municipal–, trabajarán de forma conjunta en las investigaciones y ayer ambas representantes mostraron sus disposición a colaborar.
Delegación de Gobierno no informó ayer del número de viviendas asaltadas;pero en la Asociación de Vecinos de Cueto han sumado 12 en tres semanas. «Probablemente haya alguna más, y hace unos días han robado también en el bar Pasarola», cuenta el presidente de la agrupación vecinal, Santiago Sierra.
Han entrado en casas de las calles Camus, Arriba, Inés Diego del Noval, Arsenio Odriozola –donde robaron en varios trasteros hace una semana– y este pasado fin de semana en Fumoril. «Están entrando entre las 18.00 y las 20.00 horas, justo cuando la gente no está en casa y fuerzan puertas y ventanas con una facilidad pasmosa».
En la mayor parte de las ocasiones se trata de casas donde residen personas mayores y jubilados. Personas más vulnerables y que son quienes más miedo están pasando. «A mí me entraron hace unos días y te sientes como si te violaran», narra una de las vecinas que ha padecido esta lacra y que por prudencia prefiere mantener el anonimato. «Tu casa es tu lugar íntimo y te lo destartalan». «Yo había salido al teatro y cuando volví lo encontré todo destrozado». Se llevaron algo de dinero en efectivo «aunque nunca suelo tener nada» y unas joyas. «Lo importante no es el valor material de las cosas, sino el sentimental. Mi madre ha muerto hace muy poco y guardaba unos pendientes suyos que son los que me ponía. Se los han llevado y estoy muy triste», cuenta esta vecina.
Consejos antirobos
La Policía Nacional reunió el pasado día 7 a los vecinos para informarles de los pasos a seguir en casos como este, cuando produce una oleada de robos en una zona concreta. «Nos dieron varios consejos y nos dijeron cómo hay que actuar tanto para evitar que nos roben, como para facilitar el trabajo posterior de la investigación», aclara Sierra, que hace un llamamiento para recordar que Cueto también es Santander: «En situaciones como esta tenemos que hablar de esta parte de la ciudad que casi no se ve. Es un refugio para el botellón, nos falta iluminación en algunos casos, ordenación del territorio, atención sanitaria y limpieza, porque cualquiera tira sus escombros o basuras donde le parece. Y necesitamos también mejorar la seguridad, a la vista está».
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