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No hay Pleno del Ayuntamiento de Santander en el que no se cuele el tema de las basuras. Ya sea en forma de moción, de modificación del Presupuesto o de pregunta. La oposición no se rinde: insiste sesión tras sesión en que se ejecute la ... comisión de investigación del contrato del servicio de Limpieza Viaria que ya aprobó este mismo órgano en diciembre de 2021. Pero este jueves fue diferente. Más que nada porque no suele ocurrir: todos los grupos municipales se pusieron de acuerdo a propósito de la moción que presentó Vox para estudiar el actual mapa de contenedores urbanos y soterrados por el problema de «insalubridad e higiene» que sufre Santander, según denunció la oposición.
Así, lo que suscribe el acuerdo es que la Corporación estudie el actual mapa de contenedores de residuos urbanos y buzones de contenerización soterrada para identificar aquellos puntos en los que son insuficientes o están en mal estado, además de instalar nuevos contenedores de residuos urbanos en los puntos de recogida donde se haya identificado esta necesidad.
La portavoz de Vox, Laura Velasco, denunció en su intervención que los contenedores repartidos por la ciudad son «insuficientes y muchos de ellos están rotos». Una circunstancia que, sumada al «mal diseño de las rutas de recogida de residuos», se traduce en que la basura se acumula junto a los contenedores. Y en consecuencia, «se pueden ver ratas en la ciudad». Por ejemplo, en Camilo Alonso Vega, donde hay un cartel avisando de no abrir las ventanas porque entran ratas», añadió Velasco. Por su parte, la concejala de Medio Ambiente y primera teniente de alcalde, Margarita Rojo, reconoció que existe un problema con la recogida de residuos aunque matizó que, a su juicio, los contenedores no se utilizan bien porque «tienen más capacidad de la que se usa», comentó Rojo.
La iniciativa, que incluye una enmienda del PSOE para que se trasladen los resultados de la consultoría para el diagnóstico y valoración de la situación de la contenerización soterrada, contó con el apoyo de todos los grupos. Aunque eso no implicó que el equipo de gobierno se librara de las críticas. El concejal socialista, Javier González de Riancho, hizo referencia a los contenedores soterrados, que están «precintados, desbordados y sucios, que además son pasto de roedores». En este sentido, recordó que los que se instalaron en agosto de 2018 tenían una vida útil de 15 años «y tres años después dejaron de funcionar», mientras que los de 2020 «han durado dos años».
Por su parte, Felipe Piña, portavoz del PRC, señaló que Santander tiene «una estrella de gastronomía para los carroñeros como consecuencia por la gestión de las basuras». El portavoz de IU-Podemos, Keruin P. Martínez, se posicionó en la misma línea y explicó que recibe a través del correo electrónico y las redes sociales muchas quejas de vecinos por el «estado de suciedad de Santander». Por eso, instó al equipo de gobierno a que asuma el problema. «Reconozcan –el PP– que hay algo que no funciona y que tienen voluntad y vocación para arreglarlo», concluyó el portavoz.
Otro de los puntos en los que el Pleno se puso de acuerdo fue a propósito de una moción conjunta del grupo socialista e IU-Podemos para concluir el Plan de Vivienda y «dotar a la Sociedad de Vivienda y Suelo (SVS) de Santander de capacidad para gestionar el parque público de viviendas para alquiler asequible», explicó Keruin P. Martínez. Así, el PP presentó una enmienda transaccional y finalmente el órgano plenario aprobó que la SVS analizará «ampliar su objeto social a la gestión de vivienda asequible en alquiler, la definición de condiciones y umbrales económicos para poder beneficiarse de ellas, así como el porcentaje de vivienda en alquiler en futuras promociones, empezando por 15 viviendas en el Sector 1 del Alisal», explicó Agustín Navarro, concejal de Fomento.
Con el otro punto de la enmienda presentada por los populares, el equipo de gobierno se compromete a presentar en un plazo de dos meses, ante el Consejo de la SVS, el texto final del Plan de Vivienda y posteriormente en la Comisión de Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento. Así, tanto el PSOE como IU-Podemos agradecieron a Navarro, que se incorporó recientemente, la «clara voluntad de llegar a un acuerdo», por lo que esperan que el equipo de gobierno «continúe así durante toda la legislatura».
La que no salió adelante fue la moción del PSOE que proponía «restituir el carácter público y el acceso libre a la plaza Rubén Darío y a la calle Juan Ramón Jiménez». Según explico la alcaldesa, Gema Igual, la inclusión de ambas zonas en en el inventario municipal en 2004 «fue un error material de la empresa encargada del mismo y se corrigió en su momento». Así, la regidora quiso «tranquilizar» a los más de 300 vecinos de Feygón, que al conocer la iniciativa estaban «alarmados», concluyó.
Por otra lado, el portavoz del PSOE, Daniel Fernández, denunció que los pabellones escolares de la ciudad están «hechos un asco» y acusó al equipo de Gobierno de no pedir a los técnicos municipales «que hagan más obras». También criticó la «ruina absoluta» del pabellón del colegio Marqués de Estella, donde los miembros de la comunidad educativa están haciendo de «recogedores de agua». Fernández se pronunció así en su defensa de la moción presentada por su grupo para poner urgentemente en marcha los trámites para la creación del Consejo Municipal Escolar, que se aprobó con los votos a favor de todos los grupos excepto Vox, que votó en contra.
Y ello pese a que la concejala de Educación popular, Noemí Méndez, recordó que las inversiones en educación son competencia de la Consejería del área y los pabellones, del Instituto Municipal de Deportes (IMD). Además, señaló que si bien el consejo «puede ser una herramienta», hay algunos centros y AMPAS que consideran que «más que ayudar, puede ser tedioso» porque implica reuniones.
En el Pleno también hubo tiempo para tratar temas nacionales. El PP Y Vox presentaron durante la sesión dos mociones en contra de la amnistía que ambas salieron adelante gracias al apoyo que se prestaron mutuamente. Como era de esperar, el PSOE e IU-Podemos votaron en contra. Y el voto del PRC, que mantuvo intrigada a la alcaldesa, Gema Igual, hasta el último momento. Una incógnita que se despejó rápido. Los regionalistas, al igual que el pasado septiembre, se abstuvieron. «No estamos a favor de la amnistía, que quede claro, ni nos gusta. Pero no entendemos en qué puede afectar a los vecinos de Santander», comentó Vicente Nieto, concejal del PRC. De hecho, el portavoz del partido, Felipe Piña, insistió más tarde: «No estamos a favor».
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