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Los movimientos de arena en la zona de Gamazo y Los Peligros han provocado en los últimos años la formación de dos nuevas 'playas': la de la rampa del Mundial de Vela y la Fenómeno. La primera está frente a las Naves de Gamazo, junto ... a la zona de descanso con tumbonas. La segunda, detrás del Museo Marítimo. Pero desde el Ayuntamiento niegan que sean playas e insisten en que se trata de «acumulaciones de arena» que no cuentan con servicio de limpieza y mantenimiento y que tampoco tendrá servicio de socorrismo durante el verano. Sin embargo, cada año son más amplias y más gente se anima a tomar el sol y bañarse en ellas. La concejala de Medio Ambiente, Margarita Rojo, es contundente al respecto: «No está permitido el baño». Además, no depende de ella porque se trata de una zona de servicio del Puerto sin competencia municipal.
Aunque todavía no ha llegado la temporada alta y los arenales santanderinos están bastante despejados, ayer por la mañana había un par de personas paseando a sus respectivos perros por la arena de la rampa –la Fenómeno estaba desaparecida porque había pleamar–. Una de ellas, Sofía Jaramillo, estaba de acuerdo en no considerar esa zona como playa. «Se ve que no lo es, es prácticamente parte del paseo. Hay muchas playas vigiladas en la ciudad y no creo que hagan falta más». En la misma línea, la otra mujer que paseaba a su mascota, que prefirió no dar su nombre, consideraba que la arena de la rampa «no necesita vigilancia porque es una zona muy tranquila». En su opinión, y aprovechando que el Ayuntamiento anunció recientemente que destinaría parte de alguna playa del municipio (de las 13 reconocidas) a esparcimiento canino, esta 'no playa' sería una buena zona para darle esta finalidad. «Estaría genial que fuera una playa para perros cuando la marea está baja y se puede pasear por ella. Si los perros están educados, no hay ningún problema de convivencia con la gente que toma el sol o pasea».
«Esa zona carece de los servicios que son competencia municipal, como limpieza y salvamento»
«Es prácticamente parte del paseo. Hay muchas playas vigiladas en la ciudad y no creo que hagan falta más»
Entre las personas que caminaban por el entorno, las opiniones estaban divididas. «A veces hay playa y a veces no, no deja de ser arena que viene de otra zona. Si con los años se establece y no desaparece cuando sube la marea, sí me parecería normal que hubiera vigilancia. Mientras tanto, no», razona Ricardo Llanera, que paseaba por la zona ajardinada que hay al lado de la arena con su mujer. «Entiendo que la gente se bañe aquí porque no hay olas y parece más seguro, pero mientras no haya vigilantes me parece arriesgado que la gente lo haga. Hay otras diez playas donde sí hay socorristas».
Rojo explica que en los últimos años, «por causas de todos conocidas», se ha producido una importante acumulación de arena en la zona del Promontorio de San Martín. «Sin embargo, en ningún caso se puede considerar una nueva playa». Según apunta, no lo son porque no constan como tal en el inventario de playas municipales y, por ello, «carece de los servicios que son competencia municipal, como son la limpieza, mantenimiento y servicio de salvamento y socorrismo».
Este área se trata de una zona de servicio del Puerto, en donde el baño no está permitido, y la Autoridad Portuaria de Santander (APS) colocará nuevos carteles, para reemplazar a los que ya existen, señalando la prohibición de bañarse. Desde el Ayuntamiento y ante la proximidad de la temporada de verano, Rojo insiste en recalcar que, al no considerarse playas, «esas acumulaciones carecen de los servicios de limpieza y mantenimiento y del servicio de socorrismo y salvamento. No está permitido el baño».
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