El PRC hace público su proyecto para convertir a Santander en capital del surf

A través de una serie de infografías, los regionalistas han visibilizado la transformación de dicho inmueble en un centro multidisciplinar del surf, con una estructura polivalente para la práctica del surf de escuelas, surfistas, aficionados y turistas, que sirva de «oportunidad» para «recobrar» el pulso y la actividad en El Sardinero y hacer una «gran mancomunidad» del surf en Santander.

«Cantabria es un paraíso de olas y sus playas cuentan con el potencial suficiente para la práctica de este deporte que se practica todos los días del año y cuyo impacto económico cada es mayor«, ha indicado. Asimismo, ha recordado que la marca 'surf' y la promoción de esta práctica deportiva en Santander es una de las «grandes apuestas» de la política turística del PRC porque considera que puede contribuir a la desestacionalización, con la oferta de actividades más allá de las temporadas vacacionales.

«Venimos defendiendo la cesión del edificio Rema, propiedad de la Dirección de Costas y actualmente sin uso, con el fin de crear un centro multiusos. Santander tiene todos los elementos para convertirse en auténtico reclamo nacional e internacional para los amantes del surf», ha insistido.

El PRC de Santander ha recordado que durante la pasada campaña electoral llevó como propuesta la creación de un centro de surf en el edificio Rema. Además, al inicio de la presente legislatura, en septiembre de 2019, presentaron a pleno una propuesta que consiguió el apoyo del resto de los grupos para instar al Ministerio para la Transición Ecológica la cesión del edificio.

En mayo de 2020, ante la decisión del Ministerio de «seguir adelante» con el derribo del edificio, volviendo a sacar a licitación su demolición, los regionalistas solicitaron al Ministerio una «rectificación», enviando una carta a Delegación de Gobierno en Cantabria para que «mediase» y se «respetaran» las voluntades plenarias y de los santanderinos, en referencia al apoyo de todos los grupos municipales a favor de destinar el edificio a un centro de surf.

De nuevo, en marzo de 2021 el PRC volvió a llevar el edificio a debate plenario para que, en esta ocasión, se paralizase «inmediatamente» cualquier posibilidad de derribo del edificio, con el objeto de obtener «a la mayor brevedad posible» la cesión del inmueble y dar cumplimiento de esta manera al acuerdo plenario de septiembre de 2019.