El Puerto rellena una «charca en Raos» y los ecologistas piden detener la obra

Lo primero es aclarar el lugar exacto. Para situarse, está frente al popular edificio rojo con el letrero de «ballestas y basculantes», frente al bar Raos o el Ancora, en la calle Marcos Ruiloba Palazuelos. «Linda al oeste y al norte con la plataforma de ferrocarril de acceso al Puerto», aún en Santander, ya cerca de Camargo. A partir de ahí, la institución y el grupo conservacionista enviaron ayer sendos comunicados contradictorios. El primero dice que la obra «es legal y respeta el medio ambiente» y que se hace «por las necesidades de suelo que tiene el Puerto dado el firme compromiso de la Autoridad Portuaria de no proceder a relleno más alguno de la lámina de agua de la Bahía». En cuanto a la parcela, insiste en su escaso valor. Que «está compuesta por arenas fangosas» y «sometida a la entrada y salida artificial de agua de mar a través de una tubería», que el nivel de agua no llega a la calificación de «buen estado» y hasta que el fondo sufre una «contaminación moderada por metales pesados». Afirman que, además, aunque tienen «todo tipo de autorizaciones ambientales», han incluido «una serie de medidas compensatorias» con actuaciones para eliminar plantas invasoras en Tina Menor.

SEO, por su parte, solicita «la paralización inmediata del relleno (a día de hoy, ya está hecha la mitad) de una sección de 33.000 metros cuadrados de hábitat intermareal», una actuación, dicen, «propia del siglo pasado». «SEO/BirdLife no puede entender cómo una entidad como la Autoridad Portuaria vaya en contra de los objetivos de las Naciones Unidas sobre el cambio climático».