El transporte público se pone la mascarilla

César Díaz, primer teniente de alcalde y concejal de Movilidad Sostenible, criticaba a las 08.30 horas que el consistorio seguía sin tener las mascarillas que debe repartir entre los usuarios del Transporte Urbano de Santander (TUS) cuando los autobuses ya llevaban en servicio dos horas. «Sin mascarillas nadie puede utilizar el transporte público y nosotros seguimos sin ellas, cuando hay otros ayuntamientos (puso como ejemplo el de Valladolid) que las tienen a su disposición desde ayer», lamentaba el edil.

Por su parte, fuentes de Delegación de Gobierno han defendido que las 25.500 mascarillas que corresponden directamente al Ayuntamiento de Santander estaban disponibles para su recogida en su sede de la calle Calvo Sotelo , circunstancia que se comunicó al consistorio «en la jornada de ayer». Y que incluso han intentado «ponerse en contacto» con la alcaldesa, Gema Igual, a lo largo de la mañana, pero que «no había sido posible». Un extremo que niegan desde el Ayuntamiento. Finalmente, desde el mediodía, el material ya está en manos de la Administración municipal.

Igualmente, la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones, ha destacado que el reparto de 74.000 mascarillas en los nodos de transporte (principales estaciones y paradas de tren y autobús) que están llevando a cabo este lunes voluntarios de agrupaciones de Protección Civil bajo la coordinación de la propia Delegación y la Consejería de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior del Gobierno de Cantabria, se ha desarrollado «con normalidad» y que la mayor parte de las mismas se están distribuyendo por Santander, principal núcleo de población y de movilidad, por lo que considera que no ha habido «desabastecimiento».

La entrega se ha realizado primero en estaciones de tren y autobús y después ha continuado por las paradas del TUS de Santander, en tres ejes distintos: de Valdecilla a El Sardinero; Castilla-Hermida; y General Dávila. El reparto se llevará a cabo este lunes y martes y, en caso de que sobren, continuará en los siguientes días.

Además de las 74.000 mascarillas que se encarga de repartir la Delegación del Gobierno a través de Protección Civil y Cruz Roja, otras 86.000 se distribuyen entre los ayuntamientos de la región en colaboración con la Federación de Municipios de Cantabria (FMC). De estas partidas que corresponden a los ayuntamientos, los de más de 20.000 habitantes las pueden recoger directamente en la sede de Delegación y el resto las recibirán a través de la FMC. Aunque los consistorios tienen libertad para organizar la entrega a la población de estos protectores, desde Delegación de Gobierno apuntan que el reparto debería realizarse entre colectivos vulnerables y entidades que los atienden, centros sociales, mercados y otros puntos donde pueda haber aglomeración de personas, excepto en el transporte público, para evitar así duplicar el trabajo.

Finalmente, las 18.000 mascarillas restantes hasta completar las 178.000 que el Ministerio ha enviado a Cantabria, la Delegación las entregará, para su reparto, a Cáritas, el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) y Cruz Roja.

Al igual que Quiñones, el director general de Transportes y Comunicaciones, Felipe Piña, también ha optado por la palabra «normalidad» para definir el grado de cumplimiento de la obligatoriedad del uso de la mascarilla en el transporte público. Ha explicado que la variación en cuanto al número de usuarios está siendo hoy, primer día de la Fase 0, «poco significativa» y que, aunque haya habido «algún viajero más», prácticamente todos han acudido con mascarilla a las estaciones de tren y autobús.

Piña ha valorado el «civismo absoluto» con el que está respondiendo la población a las medidas que se van implementando durante el estado de alarma y ha augurado que el «verdadero salto» en cuanto al uso del transporte publico, se producirá el próximo lunes, cuando se inicie la Fase 1, si la evolución de la pandemia lo permite.