Sánchez Monge se despide en una misa tras ocho años como obispo de Santander

En la ceremonia oficiada en la Catedral, el ahora administrador apostólico de la Diócesis recordó emocionado el privilegio que ha supuesto «haber trabajado, gozado y sufrido juntos. Haber compartido preocupaciones y esperanzas que han ido tejiendo unas relaciones muy estrechas que nunca podré olvidar», reconoció el prelado, que en la misma línea seleccionó una cita concreta de San Alberto con la que acompañó la misma idea:«No se deja sin dolor lo que se ha querido con amor». Con la mirada puesta en su relevo, Sánchez Monge invitó a toda la comunidad eclesiástica y a los representantes de la sociedad civil a acoger al nuevo obispo, Arturo Ros Murgadas, «como me habéis acogido a mí».

En el acto, al que acudieron diferentes autoridades de Cantabria, estuvo también presente el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, a cuya provincia eclesiástica pertenece la diócesis de Santander.