Cae en Santander una banda itinerante de robos en viviendas

La voz de alarma la dio un vecino de Santander el mismo día 2, al llamar al CIMACC-091 (Centro Inteligente de Mando Comunicación y Control) de la Policía Nacional, alertando de que se estaba cometiendo un robo con fuerza en su domicilio.

De inmediato se trasladó hasta el lugar de los hechos el Grupo Segundo de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (U.D.E.V.-2), de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Santander.

Fue entonces cuando el propietario de la vivienda contó a los agentes que instantes antes había sonado insistentemente el timbre de su domicilio y al acercarse a la puerta y mirar por su mirilla, había observado a dos varones, uno en la puerta de su domicilio y el otro en la de su vecino, que permanecían en actitud de escucha.

Ante el panorama, no perdió el tiempo y llamó a la Policía, a la vez que hizo un pequeño ruido que fue percibido por los sospechosos, que abandonaron el lugar. El ciudadano también describió a los agentes las características físicas de ambos autores.

Posteriormente, hasta el lugar se desplazó la Brigada Provincial de Policía Científica para la búsqueda de vestigios.

Las investigaciones policiales del Grupo Segundo determinaron que la autoría de los hechos se correspondía a una organización criminal itinerante que tiene establecida su base en el País Vasco, concretamente en Bilbao, y cuyo modus operandi son los robos con fuerza mediante los métodos del Bumping e Impresioning (en los que se utiliza láminas de aluminio o llaves multipunto para la apertura de las puertas).

De esta forma, se dispararon todas las alarmas, comunicando a los agentes del dispositivo operativo policial de prevención de robos en domicilios establecido por la Jefatura Superior de Policía de Cantabria. Así se puso en alerta a todos los dispositivos policiales, con la finalidad de evitar la comisión de nuevos ilícitos y lograr la detención de los delincuentes integrantes de esta organización criminal.

Las detenciones se produjeron en dos fases. A primeras horas de la tarde del día 2, los agentes del Grupo Segundo sorprendieron a dos de los miembros de la organización criminal cuando estos se encontraban comprobando las puertas exteriores de acceso de urbanizaciones ubicadas en la calle General Dávila.

A los detenidos se les intervino, entre otros efectos, tres llaves multipunto -las cuales son utilizadas para la apertura de las cerraduras mediante el método Bumping o Impresioning-, un soporte para las mismas, un par de guantes de color negro, unas tijeras plegables, un móvil de la marca Xiaomi y dinero en efectivo.

Posteriormente, agentes del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) pertenecientes a la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Cantabria, localiza, identifica y detiene en la calle Cardenal Herrera Oria a los otros dos varones.

A estos detenidos se les interviene: varias láminas metálicas -las cuales son utilizadas para la apertura de cerraduras por el método impresionin-, localizadas entre sus pertenencias, y un vehículo de la marca Peugeot modelo 307. Dentro se encontraron dos tablets de la marca Apple, 23 láminas de aluminio, y un calcetín anudado conteniendo más de 30 piezas de joyería.

Los agentes constataron que los cuatro detenidos estaban relacionados y que podían se participantes en múltiples robos con fuerza cometidos entre el 2021 y el 2022 en Santander. Estos robos coinciden con un amento de los mismo en la región, coincidiendo con el primer trimestre de este 2022, en el que se han denunciado 400 casos.

Los cuatro detenidos, con antecedentes por hechos similares, fueron puestos a disposición judicial. El juez únicamente ha decretado el ingreso en prisión de uno de ellos, según la nota policial hecha pública este martes.

Las dos tablets, así como todas las joyas recuperadas, fueron reconocidas y entregadas a sus legítimos propietarios en calidad de depósito. Estos efectos habían sido sustraídos y denunciados esa misma tarde, día 2 de junio. Las joyas en El Astillero, y las tablets, en Santander.