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Su instalación lleva semanas llamando la atención de los viandantes. Primero se colocaron los pedestales. Después, las pantallas. Y, a continuación, los postes con ... esa especie de 'sombrero' en la parte superior con las líneas de colores representativas del logo de Santander. El misterio ya está resuelto: estos paneles informativos forman parte del proyecto 'Smartcitizen' y servirán para que los ciudadanos puedan hacer gestiones municipales sin ir al Ayuntamiento. En la actualidad, se está trabajando en dotar de alimentación eléctrica y de comunicaciones a estos espacios: «Nuestra intención es que a lo largo de este mes de diciembre se puedan poner en servicio», apunta la alcaldesa Gema Igual.
A través de estas pantallas, colocadas en 15 zonas de la ciudad -el del centro cívico de Cueto se instalará cuando terminen las obras-, los santanderinos podrán ver en qué punto se encuentran sus trámites administrativos, registrar incidencias que detecten en la ciudad, cargar los teléfonos móviles y también podrán cargar sus tarjetas del transporte urbano municipal (TUS), algo que hasta ahora solo se podía hacer en algunos quioscos y estancos. «Se trata de socializar la tecnología y facilitar la relación de los ciudadanos con el Ayuntamiento, pero nunca vamos a dejar de dar información presencial», garantiza la regidora.
Para muchas de sus funcionalidades, los vecinos tendrán que utilizar la tarjeta ciudadana, un servicio que se pondrá en marcha próximamente y que se convertirá en el centro de 'Smartcitizen'. «Vamos a inundar la ciudad de tecnología para unificar los servicios, simplificar los trámites administrativos y facilitar el diálogo de los santanderinos con su Ayuntamiento».
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las 15 zonas interactivas tendrán pantallas con juegos para los más pequeños.
Otras consultas que podrán realizarse a través de estos tótems son conocer las actividades de los edificios y recintos municipales, calcular lo que se tarda en recorrer el espacio entre un punto y otro de la ciudad, consultar la disponibilidad de bicicletas municipales en un lugar determinado, visualizar la agenda cultural, comprar entradas, participar en procesos ciudadanos y consultar la información sobre el tiempo o las mareas. Además, toda esta información estará disponible tanto en español como en inglés para hacerla accesible a los turistas.
Los paneles también contarán con un chat a través del que se podrán realizar consultas. Al otro lado estará el personal del Servicio de Atención Multicanal para responder de forma instantánea y falicitar la información solicitada. Para poder acceder a este chat, el usuario tendrá que pulsar el icono de 'Ayuda' en la pantalla. Aunque otros servicios de los tótems requieren usar la tarjeta ciudadana, para el chat no hará falta identificarse. «Queremos que los ciudadanos puedan trasladar sus opiniones al equipo de gobierno de forma directa, lo que servirá para adoptar decisiones en función de sus inquietudes y necesidades», puntualiza la alcaldesa.
Junto a estas pantallas, los postes son zonas de descanso con dos asientos y un espacio para poder cargar la batería de los teléfonos móviles. La zona cuenta además con conexión a la red wifi pública. Como explican desde el Ayuntamiento, en tres de las 15 zonas -Complejo Ruth Beitia, Alameda Oviedo y Parque de las Llamas- se incorporarán pantallas con juegos interactivos para los más pequeños. Estarán adaptados a distintas edades y las actividades estarán ambientadas en escenarios de la ciudad.
Este proyecto está liderado por el Ayuntamiento santanderino y desarrollado junto a Red.es en el marco del Plan Nacional de Ciudades e Islas inteligentes. Además, cuenta con cofinanciación de fondos Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional).
Estos tótems no son los primeros que se instalan en Santander. Cuando se puso en marcha el metroTUS y se incorporó la línea central a los recorridos de los autobuses, desde el Ayuntamiento colocaron unos tótems en muchas marquesinas con indicadores de rutas y de recarga de tarjetas. A día de hoy, la mayoría están rotos y vandalizados, aunque muchos vecinos dudan que llegasen a funcionar. «Juraría que nunca he visto las pantallas encendidas, veo a niños jugar con los botones pero nunca en funcionamiento», afirma una vecina que viaja a diario en autobús. «Espero que con las nuevas pantallas no pase, porque es buena idea que se pueda recargar la tarjeta del TUS».
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