Trescientos drones, miles de luces y una bahía

Seguramente recuerden el espectáculo inaugural del Mundial de Fútbol de Qatar 2022. Hubo momentos memorables. Además de la presencia del actor estadounidense Morgan Freeman y el cantante surcoreano Jungkook, el cielo de Doha se iluminó con drones y fuegos artificiales ante las miradas de asombro de los presentes en el estadio y de los que estaban conectados a la televisión, que apreciaron la formación de la silueta del popular trofeo que se entrega al ganador del Mundial –la copa Jules Rimet–, la leyenda 'Welcome to Qatar' y a un futbolista pateando una pelota, entre otras. La función fue obra de la empresa francesa Groupe F, que realiza este tipo de producciones en todo el mundo desde hace 30 años y que en los últimos tiempos ha introducido los drones en sus funciones. Se trata de un grupo de reconocidos artistas que aterriza este sábado en Cantabria con trescientos drones y sus «nuevas formas de lenguaje artístico» e iluminarán la bahía de Santander a partir de las 23.00 horas y que reunirá, según Turismo, a más de 50.000 personas.

El resultado final durará 24 minutos, pero el proceso creativo ha llevado tres meses de trabajo. Con un objetivo claro: que el espectáculo quede grabado en la retina de cántabros y visitantes «para siempre». Lo dice Christophe Berthonneau, director de la obra y reconocido escenógrafo por sus creaciones originales y fuegos artificiales en eventos internacionales. Y un evento «excepcional» requiere de una gran preparación. Por eso, Berthonneau, Scott Gibbons, compositor de la música, y otros miembros del equipo viajaron hasta el Monasterio de Santo Toribio de Liébana para conocer en primera persona la historia, el paisaje y tradiciones de la región.

Allí, junto a los trabajadores de la Fundación Camino Lebaniego, escucharon la leyenda del oso que devoró al buey durante la construcción del monasterio. O la de que Santo Toribio decidió la ubicación del monasterio subiendo a la cumbre del monte Viorna, en Camaleño, y arrojando su bastón al valle. «La historia que hemos preparado es muy grande. Majestuosa. Es una composición original que recorre la cultura de Cantabria. Una cultura muy antigua pero que sigue viva», explica el director. «Será un momento mágico», añade. Y es que la exhibición, que entra dentro de la programación del Año Jubilar Lebaniego, combinará ballet, música, luces y fuegos artificiales por cielo, mar y tierra. Todo ello inspirado en las tradiciones «ancestrales y los maravillosos paisajes» de la región. Pero Berthonneau reconoce que un evento así exige una gran preparación técnica. De hecho, ayer por la mañana ya había técnicos ultimando detalles en la isla de la Torre y junto al Museo Marítimo del Cantábrico, desde donde se controlará la música del evento. «Los drones son muy frágiles y no tienen tantos años de historia como los fuegos artificiales, por lo que tenemos que cuidar cada detalle al máximo», indica.

Pero lo que no le falta a este grupo de artistas franceses es precisamente experiencia, ya que llevan 30 años tiñendo de color los cielos de todo el mundo. «Nuestra capacidad para reunir a equipos multidisciplinares de talento nos permite realizar proyectos originales y significativos en las mejores condiciones», explican.

Groupe F dispone de «una herramienta de producción y realización integrada que es única en las artes escénicas en espacios públicos». De París a Seúl, pasando por Adelaida y el Festival de las Artes de Auckland, ahora llegan a Santander con un espectáculo insólito para la región. «Lo del sábado será una obra que esperemos emocione a todos los cántabros», concluye.

Por eso, el servicio de Transportes Urbanos de Santander (TUS) reforzará sus líneas hacia La Magdalena. Antes del evento, se añade un refuerzo de dos autobuses con salidas del Intercambiador de Valdecilla entre las 20.10 horas y las 22.30 horas, cada 20 minutos. Una vez termine, habrá un refuerzo de siete autobuses con salidas de La Magdalena, entre las 23.45 y las 01.00 horas, cada cinco minutos, hasta el Intercambiador de Valdecilla.

Además, se cortarán al tráfico los accesos a La Magdalena y al aparcamiento de El Camello y, si hay «mucho tráfico», incluso desde Puertochico.

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