¿Qué fue del túnel de General Dávila?

Ahora, con la primera fase de las obras del Plan Director de General Dávila recién iniciada, ningún documento menciona el paso subterráneo. No aparece en los pliegos de la obra actual y el Ayuntamiento explica que los planes han cambiado y su construcción ha quedado descartada. Esto se debe a que tras la puesta en marcha del Distribuidor de La Marga (en 2012) ha disminudo el tráfico también en esta zona y ya no es necesario hacer el túnel.

Como recuerdan fuentes municipales, el Ayuntamiento encargó en 2009 un estudio de alternativas con el que se pretendía analizar las posibilidades para mejorar esa intersección que soportaba mucho tráfico y que está en una zona con centros escolares que generan múltiples incidencias, sobre todo en los horarios de entrada y salida a las clases. «Con la puesta en marcha del Distribuidor de La Marga y de varias medidas para la mejora de la movilidad se entendió que esta solución (el paso subterráneo) perdía eficacia a la hora de regular el tráfico en esa intersección, dado que se comprobó que el tráfico en General Dávila había disminuido más de un 15% en diez años (entre 2012 y 2022) y casi un 20% en Camilo Alonso Vega».

La primera vez que se habló de esta obra el Ayuntamiento había estudiado doce alternativas para acabar con los atascos en el cruce entre General Dávila y Camilo Alonso Vega –entre la finca de Las Carolinas y el instituto José María Pereda–. Descartaron las grandes rotondas y concluyeron que la solución más acertada era que la circulación de las dos vías se cruzase, pero en diferentes alturas: una en superficie (Camilo Alonso Vega) y otra subterránea (General Dávila). Esto se dijo hace 15 años. Hasta dos años después no volvió a saberse nada de esta obra, y fue cuando el Consistorio santanderino presentó al equipo de Gobierno de Cantabria –liderado entonces por Miguel Ángel Revilla–, el proyecto. Llega 2011 y aún no se ha hecho nada. El posterior Gobierno de Ignacio Diego tampoco abanderó el proyecto, ya que coincidió con la crisis, los recortes y los ajustes. Pese a la situación, el entonces alcalde, Íñigo de la Serna, y seis concejales se reunieron en 2012 con los vecinos para diseñar el futuro de esta zona de Santander.

Ahí se produjo el salto temporal hasta 2016, cuando el proyecto parecía a punto de arrancar. El equipo de gobierno (PP) había decidido asumir el gasto para después reclamárselo al Ejecutivo regional. Llevó la iniciativa al Pleno y la aprobó con el apoyo de Ciudadanos. Aunque la intención era sacarlo a licitación justo después para adjudicar la obra cuanto antes e iniciarla en enero de 2017, no volvió a saberse más de ella y el Ayuntamiento confirma ahora que ya no es necesaria.

La primera fase del Plan Director de General Dávila arrancó a finales de abril y abarcará desde la rotonda de Los Osos hasta el cruce con Camilo Alonso Vega. Las actuaciones incluyen la instalación de un carril bici, la supresión de un carril de circulación y la construcción de aceras más anchas para facilitar el paso de los peatones. Unas intervenciones que distan mucho de lo planteado en 2009 y ejemplifica el cambio que se ha producido en la movilidad urbana. Si entonces la idea era contar con más carriles para el tráfico, las intervenciones actuales se enfocan en suprimir uno para dar más espacio a las bicicletas y a los peatones.

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