Vallas en los locales vacíos de Isabel II para evitar que pernocten los sintecho

El Ayuntamiento ya lo adelantó: «En este tipo de casos trabajamos para poder dar con los dueños de los locales de cara a evitar estas circunstancias. La implicación de los propietarios es imprescindible para que estos espacios se encuentren en perfecto estado, como es su obligación», añadió.

Dicho y hecho. Según explican fuentes municipales, la Concejalía de Comercio se puso en contacto con los gerentes de los espacios y finalmente la colocación de las vallas fue la decisión acordada. «También limpiaron los escaparates», añaden. Sin embargo, ayer aún quedaban restos de latas vacías y bolsas tiradas.

Hay dos grandes vallas. Una en el local que ocupó la zapatería Dulccinea -ahora en la esquina de la misma calle bajo el nombre Bertta-, donde pernoctaba «un grupo de más de diez personas», según los vecinos. Justo enfrente, ayer, varios viandantes se paraban a observar una de las farolas en las que hay un altar improvisado en homenaje al joven que falleció a principios de septiembre y que llevaba un par de noches durmiendo ahí.

La otra valla se ha colocado en el siguiente escaparate, donde se encontraba la tienda Confecciones Lanfil, que fue una tienda de ropa femenina. Allí, hasta el pasado lunes se podía observar una muralla de cajas de cartón que tapaba colchones, carritos, mantas, sillas y edredones.

La solución no convence del todo a los residentes. Por un lado, Eudaldo Pajares, de Calzados Pajares, comercio local de la zona, reconoce que la alternativa de las vallas «no es la mejor opción, pero de lo malo, creo que es lo menos malo». A pesar de que entiende que se podría ser más restrictivo, agradece que los propietarios hayan tomado cartas en el asunto, ya que «esto se estaba convirtiendo en una zona muy conflictiva». Y es que, tal y como comentó hace un par de semanas, hay personas que evitaban pasar por Isabel II por miedo. Así, espera que ahora las circunstancias cambien. «Al final los principales interesados en que el aspecto de la calle cambie son los propios dueños de los locales. Los tienen en alquiler y con la estampa que teníamos era imposible que se alquilasen», añade.

A Javier, vecino de la zona, esta solución le despierta «sentimientos encontrados». A su juicio, es una forma de «atajar» el problema de forma «rápida». Pero cree que es una cuestión de fondo que requiere de más tiempo: «La limpieza es primordial y también la presencial policial para evitar que vuelva a suceder lo mismo», comenta al respecto.

El aspecto actual de Isabel II llama especialmente la atención teniendo en cuenta que en 2020 la calle estrenó aceras más anchas -con un carril menos para los coches-, farolas nuevas, parterres que recorren la vía y más árboles. Los trabajos de regeneración urbana, que fueron ejecutados por Rucecan con una inversión de 950.000 euros, comenzaron en enero de 2019 y sufrieron dos parones a petición de los comerciantes -en verano y Navidades-, por lo que el fin de las intervenciones se retrasó cinco meses. Las actuaciones pretendían «dar un respaldo al comercio de la ciudad», expresó la alcaldesa, Gema Igual, durante su inauguración.