«Vamos a cortar la carretera»

Este estrecho paso que discurre a la misma altura y sin barrera de separación de la N-611, se usa a diario por los vecinos de la zona. «Es una vía principal para ir al colegio, pasan todas las mañanas por aquí los niños; también para acceder a la tienda de ultramarinos, el estanco, o el bar de Marta». También denuncian que los carritos de los niños «se quedan encajados». Y lo mismo ocurre con las sillas de ruedas. De hecho, cuentan, «hace dos días tuvimos que sacar a la fuerza entre cuatro a un vecino con discapacidad que se quedó atascado».

Los vecinos afectados aseguran también que por esa zona transitan peregrinos del Camino de Santiago a diario, «que con sus enormes mochilas no entran en la acera y tienen que invadir la vía». «Es una vergüenza y pasamos miedo», exclama el hijo de Marta, propietaria del bar más afectado por esa estrechez de la acera. El presidente de la Asociación de Vecinos de Campogiro, Ricardo Mora, señala que los peligros «saltan a la vista y es obvio que este paso no cumple con ninguna normativa de seguridad». Recuerdan que «desde hace años» llevan pidiendo que se arregle, pero «al ser una carretera estatal, el Ayuntamiento le pasa la pelota a Fomento y éste dice que no tiene dinero para acometer las obras». Así que el problema sigue sin solucionarse, lo que indigna al vecindario: «Nos tienen olvidados y nosotros también somos ciudadanos de Santander. Les pedimos a las administraciones que conjuntamente se pongan de acuerdo y tomen medidas urgentes para reformarlo».

La gota que ha colmado el vaso de su paciencia tuvo lugar la semana pasada al comenzar unos trabajos de ampliación de las aceras en la zona, sin que se incluyera precisamente este tramo. «No es lo que habían prometido», aseguró Juan Antonio Fernández, vecino de la comunidad de Las Palmeras. «Nos habían insinuado que estos trabajos serían para solucionar el problema, pero nuestra gran decepción llegó al ver que se trata de una reforma menor y no en este sitio, que es lo más urgente, sino en la acera de enfrente».

«Hemos abierto los ojos y ahora sabemos que no se piensa solucionar. De esta forma, antes de que haya un accidente, vamos a hacernos oír», explicó Mora. La Asociación de Vecinos de Campogiro envió el viernes una carta a la Delegación de Gobierno para que les permita manifestarse el próximo día 21 de junio, con un corte de tráfico programado de 13.00 a 14.30 horas. «Vamos a cortar la carretera durante hora y media. Será nuestra manera de que nos escuchen. Ya lo hicimos hace años para que nos pusieran un semáforo, que era fundamental porque había una alta siniestralidad de accidentes con víctimas mortales y después de esa acción lo conseguimos», explicó Mora, quien calcula que unos 150 vecinos secundarán la protesta.

«Contamos con el apoyo de la Federación de Asociaciones Vecinales de Santander y todos los vecinos de la zona se sumarán ese día», asegura. Fernández, de la comunidad de propietarios Las Palmeras, explicó que «es un tramo de gran densidad de tráfico, por el que hay que circular a 50 km/h, pero nadie lo cumple porque es de salida de la ciudad y los conductores aceleran. Hace unos años hubo un atropello en este punto y fallecieron dos personas». Por su parte, Fernando Oria, de la asociación de vecinos, apunta que «el tramo es muy peligroso. Hace unos días se cayó un niño pequeño y el susto fue enorme». «La alcaldesa debería exigirle a Fomento las obras de mejora, pues ella tiene más fuerza que nosotros. Nos representa a todos, no a unos pocos, también somos de Santander», critica.

La asociación de Campogiro también llamó la atención sobre la ausencia de limpieza viaria. «Aquí no acude nadie a limpiar la acera desde hace un año, lo quitaron del pliego de condiciones y la empresa de limpieza ya no tiene que pasar», señaló otro vecino. «Estamos olvidados, en tierra de nadie», se quejó Fran Queipo, tercera generación de una tienda de ultramarinos y estanco.