Los vecinos de Nueva Montaña barajan contratar a sus propios técnicos para revisar las obras

A estos dos grupos de profesionales puede que se una otro más, ya que los vecinos afectados están barajando contratar a sus propios técnicos para supervisar todas las intervenciones que se realicen y asegurarse por sí mismos de que se cumplen con las condiciones de seguridad y que se puede acceder a los garajes sin peligro, con un informe redactado por los profesionales que ellos mismos designen. Los propietarios se reunirán el viernes en una asamble extraordinaria para tomar la decisión y, si se da el visto bueno y se contrata un servicio propio, se pondrán en contacto con el Gobierno y el Ayuntamiento para que todos los ingenieros trabajen juntos.

Pero surge un conflicto. Las obras comienzan mañana y los vecinos no tendrán técnicos propios hasta, al menos, la siguiente semana. Por ello, pedían ayer que se paralizasen las intervenciones hasta que se resolviese esto. «Es urgente empezar ya, no podemos detenerlo durante una semana. Lo que sí se puede hacer es desescombrar y esperar a vuestros técnicos antes de abrir el garaje uno de nuevo, que calculemos que esté listo a finales de esta semana. Por dos o tres días más no pasaría nada», apunta. Los vecinos insistieron en que les gustaría que los ingerieros que contraten estén presentes durante toda la operación, pero Gochicoa y Díaz les garantizaron que, en cuanto los contratasen y se pusieran en contacto con los de Allianz y los del Ayuntamiento, tendrían acceso a todos los informes y fotografías que se hagan durante los primeros días. «Y si quisieran realizar cualquier prueba a mayores, se solicitará también», apuntó Díaz.

Con el inicio del desescombro comenzarán a extraerse los vehículos, que se colocarán en una campa a la que los vecinos podrán acceder para recoger los objetos que tengan dentro de los coches. Allianz se irá poniendo en contacto individualmente con cada propietario para informar sobre la evaluación de daños de los automóviles y los seguros de cada propietario también podrán examinarlos una vez extraídos.

Con un plazo previsto de ejecución de un mes o mes y medio, las tareas consistirán en la retirada de 3.000 toneladas de hormigón y 8.000 metros cúbicos de tierra, correspondientes a la zona que se encuentra demolida y a un perímetro de seguridad establecido por Gesvican, así como todos aquellos elementos de hormigón que se encuentran defectuosos y que por motivos de seguridad conviene extraer.

Esta semana se ha apuntalado mediante una máquina especializada la zona de los garajes que no resultaba accesible hasta el momento. Respecto al garaje uno, cuyo acceso también está restringido, se va a proceder a la retirada de la sobrecarga de tierra que existe en la zona mediante el uso de otra máquina especializada con el fin de poder reabrirlo la semana que entra. Gesvican mantendrá un equipo técnico de vigilancia con el objetivo de asegurar que los trabajos se realizan de la «mejor forma posible».