Santander, con la vista puesta en las luces de Navidad

El contrato abarcará la totalidad de la actuación: el suministro de los adornos, su instalación y su desinstalación. Y, aunque aún parece pronto, el encendido no se producirá hasta el 1 de diciembre. Los Reyes Magos serán los que, con su marcha, se lleven también las luces. En concreto, el último día de iluminación será el 7 de enero. El horario de encendido que contemplan los pliegos es, de lunes a jueves, desde las seis menos cuarto a las doce de la noche y, los fines de semana, se alargará hasta las dos de la madrugada. Hay días especiales en los que estas luces se prolongarán hasta las siete de la mañana: Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo y la noche y el día de Reyes. Una vez las fiestas finalicen, el adjudicatario contará con 20 días para retirar todos los adornos.

Además de las 24 calles que contarán con guirnaldas y arcos de luz, las plazas más céntricas de Santander -la de la Catedral, Pombo, la Porticada, la del Ayuntamiento y la de Puertochico- lucirán figuras ornamentales y árboles luminosos. También volverán los clásicos carteles de 'Felices Fiestas' en las entradas norte y sur del Mercado de la Esperanza. Desde el Ayuntamiento recalcan que todas las luces utilizadas serán 100% LED para garantizar la eficiencia y reducir las emisiones de CO2.

Los arcos luminosos son los elementos decorativos más reconocibles de la Navidad. Este año, habrá un total de 140 elementos de este tipo que adornarán las principales calles de la ciudad. En la plaza de la Catedral se adornarán ocho arbustos y catorce árboles naturales con pequeñas luces y esta misma técnica se repetirá en el Paseo Pereda, donde se decorarán con luz 135 árboles más. Habrá figuras luminosas en 3D en las principales plazas y también se contratará un abeto de 17 metros de alto que aún no se ha acordado dónde se colocará.

Según recogen los pliegos del contrato, una vez realizado el montaje de todos los elementos decorativos y durante todo el periodo de funcionamiento, la empresa adjudicataria efectuará inspecciones diarias con el fin de anticiparse a averías o irregularidades en el funcionamiento. Además, se hará cargo lo antes posible de todas las averías que puedan surgir durante el mes y medio que estén colocados los diferentes adornos.

El covid creó el año pasado mucha incertidumbre en torno a la celebración de la Navidad. Con la población aún sin vacunar y la segunda ola acechando, se relajaron las restricciones para permitir reuniones y reencuentros familiares en estas fechas. Hubo polémica ante esta decisión y también en torno a si debía destinarse dinero o no a las luces y la decoración. Desde la oposición, algunos partidos pidieron que el presupuesto sirviera para engordar ayudas como los vales 'Santander Vale+' pero, finalmente, desde el equipo de gobierno se decantaron no sólo por adornar las calles, sino por poner más luces de lo habitual para tratar de animar las calles y los comercios.

Así, si otros años los propios comerciantes colaboraban en la iluminación de las calles, en 2020 el Ayuntamiento se hizo cargo del coste íntegro. Incluso, amplió el presupuesto inicialmente marcado para llegar a más calles de la ciudad. El Consistorio también se apoyó en patrocinios. Por ejemplo, el Banco Santander aportó 25.000 euros para la iluminación y decoración navideña en las calles Ataúlfo Argenta y Marcelino Sanz de Sautuola a través de un contrato privado de patrocinio de publicidad.