Wert: «No me siento desacreditado por el PP»

Ha rechazado entonar 'mea culpa' alguno pese a ser el autor principal de una ley educativa, la Lomce, que hoy está dispuesto a cambiar hasta el PP, el partido que le nombró y que la aprobó en solitario, y pese a que sacó adelante la norma en 2013 frente a toda la oposición política y la totalidad de las organizaciones de profesores, padres y alumnos, que hoy se preparan ya para enterrarla.

"A mi edad, no me siento desacreditado por nada", ha contestado a los periodistas sobre la nueva postura del PP a la salida de una comparecencia parlamentaria en la que fue citado por Unidos Podemos, en un claro ajuste de cuentas político, para que respondiese a la pregunta de ¿qué es lo que hay que hacer para no lograr el pacto educativo.

Ha asegurado que se niega a tomar "como algo personal" que el PP haya aceptado paralizar la medida estrella de su reforma educativa, la imposición de unas reválidas al final de la ESO y el Bachillerato sin cuya superación no se obtenía el título académico, o que el partido que le nombró esté ahora dispuesto a renunciar a otros muchos de los contenidos de la Lomce para tratar de alcanzar un pacto de Estado educativo.

Wert ha vuelto a defender en el Congreso la validez y la necesidad de las reválidas, que recordó se hacen en otros países con sistemas educativos de éxito, y dio a entender que que los populares actúan ahora así no tanto por convicción en que la Lomce esté plagada de errores como por la necesidad política, al haber perdido la mayoría absoluta. "En política hay que tener flexibilidad intelectual y entender que las circunstancias distintas llevan a procesos distintos", comentó al respecto.

El exministro, que fue premiado por Mariano Rajoy con un puesto de embajador de España ante la OCDE en París tras su cese en 2015, en lo que la oposición ha definido como "un retiro dorado", lo que sí dejó claro es que no tiene ganas de volver a ser miembro del Gobierno.

Wert ha ignorado todas las críticas de la oposición, que lo acusó de haber incendiado el país y la comunidad educativa para imponer en solitario una ley, la Lomce, por razones "ideológicas" y ha justificado la imposibilidad de pactar con nadie la norma por las circunstancias políticas adversas que le impusieron los recortes presupuestarios contra la crisis y para evitar la intervención de España por la UE.

"Las circunstancias políticas ahora son muy distintas de las anteriores. Yo hice lo que pude para consensuar la ley, pero no había condiciones", justificó, antes de asegurar que "los partidos de la oposición no querían participar en un proceso condicionado por las restricciones fiscales". Tanto es así que alentó el actual proceso para la consecución del pacto educativo, ignorando el hecho de que tiene como principal objetivo sepultar su trabajo. "Es una iniciativa digna de toda alabanza, y si se consigue un pacto es evidentemente beneficioso", ha señalado.

La oposición critica el «triunfalismo»

Todos los partidos de la oposición criticaron hoy el "triunfalismo" de Wert en su comparecencia, le acusaron de retorcer los datos y de ponerse medallas por políticas de su antecesor en el cargo, el socialista Ángel Gabilondo, pero lo hicieron ver que daba igual lo que dijese porque la prueba de que había fracasado es que estaban hoy todos reunidos en la subcomisión, incluido el PP, "porque la Lomce está muerta" y para "arreglar sus errores".

El exministro escuchó en la hora de comparecencia toda clase de reproches, pero los más duros, sin duda, procedieron del portavoz socialista, Manuel Cruz. Empezó por afear a Unidos Podemos que hubiese citado al exministro porque es "una comparecencia perfectamente inútil" para avanzar hacia un pacto de Estado y porque "nosotros nunca llamamos a un pirómano para apagar un fuego". Pero, ya con Wert delante, le preguntó retórico "¿usted es consciente del daño que ha hecho a la educación?". El mismo Cruz se dio la contestación en forma de sentencia: "¡Nunca vuelva a poner las manos sobre la educación en este país!".

Solo el PP mostró un mínimo de comprensión con Wert, aunque su portavoz, María del Carmen González, no ocultó que el partido ya ha pasado la página de su etapa. Reprochó a Podemos que tratase de convertir la subcomisión en un juicio al exministro, pero le avisó de que, "pese a sus provocaciones", no van a lograr apartar a los populares del intento de pacto de Estado. No obstante, admitió que la Lomce tiene los días contados cuando dijo que "si hoy estamos aquí es porque aún no hemos conseguido que toda la comunidad educativa y la sociedad se sienta partícipe de una ley".