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Nueve de las diez universidades españolas que mejor combinan las actividades docentes con las de investigación e innovación son públicas, según la octava edición del informe U-Ranking, elaborado por el BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE). En esta clasificación, la primera ... es la Universidad Pompeu Fabra, seguida por la Carlos III de Madrid, la Autònoma de Barcelona, la Politècnica de Catalunya y la Politècnica de València. La primera universidad privada es la Universidad de Navarra, que forma parte de un grupo que completa las diez primeras posiciones con la Autónoma de Madrid, las universidades de Cantabria y de Barcelona y la Rovira y Virgili. En general, las universidades públicas superan la media en investigación, un ámbito en el que se quedan muy atrás las universidades privadas, que sin embargo, están por encima de la media en rendimiento docente.
Los autores del estudio, que se ha presentado este martes, constatan que tras las posiciones de las universidades en los rankings se encuentran dos elementos que estas instituciones pueden controlar «mediante una gestión adecuada»: la especialización de cada universidad y la calidad de sus resultados docentes e investigadores por ramas y titulaciones. «Las mejores universidades suman ventajas especializándose en áreas en las que son capaces de obtener buenos resultados, de manera que su especialización las refuerza», sostiene el informe.
El U-Ranking ofrece varias conclusiones interesantes. Así, aunque la variable más relevante para la empleabilidad es el tipo de estudios cursados, la titularidad de los centros importa también en la inserción. Los titulados en las universidades privadas presentan mejores indicadores medios de afiliación a la Seguridad Social, bases de cotización y porcentaje de contratados en puestos que requieren titulación universitaria.
En todas las ramas, excepto en Ciencias de la Salud, las universidades privadas superan a las públicas en los promedios de los indicadores disponibles de inserción laboral. Las ventajas son más importantes, sobre todo, en Ciencias Sociales y Jurídicas, la especialización que atrae más alumnos y en la que las universidades privadas concentran el 62% de sus egresados. Sin embargo, las cinco titulaciones con mejor inserción son Medicina, Podología, Óptica y Optometría, Farmacia y Enfermería (que pertenecen al área de Salud), precisamente aquellas en las que destacan las universidades públicas. El ranking de empleabilidad por titulaciones continúa hasta el puesto número 15 con estudios relacionados con las ingenierías. Por el contrario, las carreras con menos salidas laborales son las de Turismo, Gestión y Administración Pública y Bellas Artes.
Según el U-Ranking, la empleabilidad de un titulado se potencia «mediante la adquisición de conocimientos, competencias, habilidades y capacidades, que facilitan el aprovechamiento de su formación para ejercer adecuadamente la profesión para la que un título habilita». El estudio subraya que la inserción laboral de los titulados depende de la contribución de las universidades a su empleabilidad, pero también de otros factores que la universidad no controla directamente, como el entorno sociolaboral de los egresados, la localización de la universidad o el momento del ciclo económico.
Con datos de la situación en 2018 de los egresados cuatro años antes (curso 2013-2014), las universidades privadas superan en casi todas las ramas a las públicas en los los indicadores disponibles de inserción laboral. Las ventajas son mayores en Ciencias Sociales y Jurídicas, pero también en Ingeniería y Arquitectura y en Artes y Humanidades, aunque en ésta, la inserción es problemática en todas. En las universidades públicas los resultados de inserción laboral solo son mejores que en las privadas en Ciencias de la Salud.
Las ventajas en la inserción de las universidades privadas son, en general, mayores un año después del fin de la carrera, pero la diferencia se va diluyendo paulatinamente. Aun así, a los cuatro años, la tasa de afiliación de los egresados de universidades privadas es 4,5 puntos porcentuales superior (al año de titularse era de 14 puntos), el porcentaje de cotizantes en grupos compatibles con una titulación universitaria es 15,4 puntos superior (al año, 20,8 puntos) y sus bases medias anuales de cotización son 3.547 euros más elevadas (frente a 4.895 euros el primer año).
¿Cuáles son las claves del éxito en la empleabilidad de las privadas? De acuerdo al informe, una atención más personalizada a los egresados, que incluye un acompañamiento en la búsqueda de empleo, unas redes de antiguos alumnos más densas y activas, y una concentración de la oferta en títulos más empleables, al no asumir la función de servicio público de atender todas las ramas del conocimiento. Además, «la concentración de la oferta privada en áreas geográficas más prósperas acaba implicando mayor oferta de empleo y bases de cotización superiores». También, «una extracción social más alta de las familias de los egresados (que han tenido que poder pagar matrículas más elevadas y cuentan con ventajas relacionales en un mercado de trabajo donde la recomendación de amigos y familiares sigue siendo un activo clave en la búsqueda de empleo) es también una causa potencial de estas diferencias», destaca el informe.
El U-Ranking denuncia que «España tiene dificultades desde hace décadas para generar el capital humano que el tejido productivo demanda y, al mismo tiempo, la economía española aprovecha solo parcialmente el talento que se genera»; una dificultad que se acentúa durante las crisis. En ese sentido, la situación en 2020, a causa de la pandemia, hace prever que la inserción de los titulados más recientes será dispar dependiendo de las titulaciones. Por las características propias de la crisis sanitaria. las dos ramas que mejores perfiles de inserción presentan –Ciencias de la Salud e Ingenierías- «podrían ver reforzadas sus oportunidades de empleo como consecuencia de las mayores demandas relacionadas con la salud y la aceleración de los procesos de digitalización». En cambio, subraya el estudio, en otras ramas con mayores problemas de inserción «podrían pesar más todavía las dificultades que padecen al combinarse con las derivadas de una fase baja del ciclo económico».
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