El Gobierno no distribuirá mascarillas a pesar de extender su uso a partir de mañana

Salvador Illa ha explicado que el texto va a recoger la obligatoriedad de que se usen mascarillas de tipo «higiénico o quirúrgico» y ha adelantado que la Administración no va a ocuparse de distribuir este material. «En principio cada ciudadano tendrá que proveerse de las mascarillas», ha señalado el titular de Sanidad.

Illa no ha especificado si se va a permitir la utilización de otro tipo de mascarillas, como las tipo profesional que distribuyó la Comunidad de Madrid, ni las sanciones a las que los ciudadanos se pueden arriesgar si incumplen la obligación de portar la prenda.

La orden sobre la que esta misma tarde están todavía trabajando los técnicos de Sanidad recogerá varias excepciones para el uso del 'tapabocas'. Desde el principio, el director del Centro de Coordinación de Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, han insistido que la utilización de mascarillas podría comportar problemas para las personas con problemas respiratorios (como el asma), para personas con ansiedad o para los más pequeños.

Salvador Illa ha negado tajantemente hoy que la orden que amplía el uso de las mascarillas sea un nuevo bandazo del Ejecutivo, que hasta ahora se había negado a ordenar su utilización arguyendo, incluso que sus uso podría ser contraproducente al provocar una falsa sensación de seguridad.

«Todos nuestros protocolos están en permanente revisión», ha argumentado el titular de Sanidad, que ha insistido en la medida se ha «consensuado», tras «escuchar a los expertos y a las autonomías». De hecho, han sido la práctica totalidad de las comunidades las que habían insistido al Gobierno central ordenar el uso de mascarillas en todos los espacios públicos y no solo en los sitios donde no se puedan mantener los dos metros de distancia.

El ministro de Sanidad, que hace solo unas semanas rechazaba la utilización de este instrumento fuera del medio sanitario, ha defendido hoy que su uso obligatorio está en la «línea de otros países europeos». Según Salvador Illa, la orden de las mascarillas ha llegado ahora porque está en consonancia con la actual «fase de la desescalada».

En cualquier caso, la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre las mascarillas no ha cambiado durante la pandemia. A juicio de esta entidad, solo quienes tengan tos o estornudos deben usarlas y las personas sanas se la deben poner si atienden a alguien que está infectado. «Las mascarillas solo son eficaces si se combinan con el lavado frecuente de manos mediante una solución hidroalcohólica o con agua y jabón», dice la OMS, que insiste en la necesidad de «usarlas y eliminarlas correctamente».