Práctica que crea proyectos

Con «ganas de seguir aprendiendo». Así es como se presenta el IES Cantabria a esta nueva edición de STARTinnova, y lo hace con un equipo de Grado Medio de Operaciones de Laboratorio y otro de Grado Superior de Laboratorio de Análisis y Control de Calidad. Para tratar de elaborar proyectos innovadores contarán un año más con la empresa mentora Centro Tecnológico CTC, la cual ayudará a los alumnos con sus recursos y experiencia empresarial para que la participación en STARTinnova sea tan positiva como en ediciones anteriores.

«Muchos alumnos ya han oído hablar del programa. De hecho, este año participo con algunos de los alumnos que se inscribieron en la anterior edición. Han pasado a Grado Superior y como la experiencia que tuvieron en Grado Medio fue muy buena, quieren seguir», explica el tutor de los grupos, Jorge del Cura. Por otro lado, la experiencia y practicidad del programa han ayudado a que el centro haya iniciado en el presente curso un aula de emprendimiento, la cual tratarán de asociar a STARTinnova. Y es que, tal y cómo explica la directora del centro, Ana Isabel Fernández, «el hecho de participar es algo muy bueno para tenerlo en el currículum y si, además, como en otras ediciones, llegan a ser finalistas, mucho mejor». «A lo largo del programa se dan cuenta de que lo que trabajan les sirve para su futuro laboral y, por otro lado, el contacto que tienen con la empresa mentora es muy fructífero porque pueden ver de primera mano la realidad laboral», añade Fernández.

«Nuestra participación supone una vía directa para despertar la vocación innovadora entre el alumnado y demostrar que CTC es el lugar de cualquiera que pretenda realizar una carrera profesional vinculada a la innovación en Cantabria. En este sentido, motivar a los estudiantes para poner en marcha nuevas iniciativas que den soluciones a problemas existentes en diversos ámbitos es el primer paso para adentrarse en los procesos de transferencia tecnológica que diseñamos y que resultan fundamentales para impulsar la competitividad industrial de la región. Además, como consecuencia de nuestro incremento de actividad, necesitaremos personal investigador a corto y medio plazo», explica Sancristobal.

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