Una radiografía de 2000 a 2025
Mirarse a un espejo de 25 años
Álvaro Machín | Santander
A estas horas, hace un cuarto de siglo, tal vez usted estuviera tomando un café. Pagaría 80 pesetas, podría fumar en la barra y no vería a nadie mirando más de diez segundos la pantalla de un móvil. Es un ejemplo. La vida, los hábitos y hasta el paisaje cántabro han experimentado un cambio radical