Pánico a bordo por la surada
«Se movía muchísimo, medio avión iba vomitando, las azafatas no se podían poner de pie...»
Ana del Castillo | Santander
Más de 800 pasajeros se vieron afectados ayer por los desvíos y cancelaciones en el Seve Ballesteros como consecuencia del fuerte viento: unos quedaron tirados en Zaragoza y otros vinieron en autobús o coche privado desde Madrid