Un albergue para peregrinos en bicicleta

El regidor insiste en la singularidad del proyecto, ya que en la comunidad autónoma no existe un hospedaje para peregrinos de estas características, que esté especializado en aquellas personas que emprenden el Camino de Santiago sobre ruedas. «Queremos ofrecer un servicio de atención especializado a este tipo de peregrinos y que el albergue, además de las dotaciones propias de un hospedaje, cuente con un pequeño taller de reparación y venta de equipos y accesorios para ciclistas, aprovechando que el propio complejo deportivo Óscar Freire tiene una vinculación muy directa, al igual que la ciudad, con este deporte», afirma López Estrada.

La reforma del edificio, según el alcalde, incluiría, además de la reparación de la cubierta del edificio, el mantenimiento del museo dedicado al ciclismo y el gimnasio. «En principio lo que se pretende es destinar la planta superior a lo que es propiamente el albergue y zona de alojamiento y la planta baja para servicios. Allí se podría reubicar el museo y el gimnasio», señala. Asimismo, el inmueble, de unos 800 metros cuadrados, cuenta con una cafetería con comedor que serviría para cubrir la oferta de restauración, aunque López Estrada no descarta que también sea sensible a la reforma. Con la intención de asegurar a los peregrinos un buen descanso al finalizar la jornada y también un sitio acondicionado para guardar y cuidar su bicicleta, nace el proyecto de albergues especializados en las dos ruedas, que pretende dar un trato especial y adaptado a las necesidades de los ciclistas.

Este tipo de instalaciones -de los que ya hay alguno en otras comunidades autónomas- son especialmente sensibles a las necesidades de las personas que realizan el Camino sobre ruedas y están perfectamente adaptados para ellos y sus monturas.

Además, como destaca el Ayuntamiento, los servicios de estos alojamientos se amplían y acondicionan cada año para cubrir mejor a las necesidades de los 'bicigrinos' y hacer de este movimiento todo un referente en el Camino de Santiago. «La ida sería poder contar con un servicio de alquiler de bicicletas, embalajes en los albergues para facilitar el transporte, tienda específica con productos para ciclistas, taller para reparación y mantenimiento de las bicicletas... En definitiva, una serie de servicios que resulten atractivos a los peregrinos que realizan el Camino en bici», apunta López Estrada.

En cuanto a la financiación del proyecto, dentro de las actuaciones que se llevarán cabo dentro del Plan Turístico Nacional Xacobeo 2021-22, el secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, confirmó durante una visita a la ciudad, que Torrelavega recibirá 400.000 euros para la rehabilitación del edificio.

El Ayuntamiento será el encargado de sacar a licitación la redacción del proyecto, para después entregar el documento para la ejecución de los trabajos a la Fundación Camino Lebaniego, organismo público dependiente de la Consejería de Turismo. El albergue se habilitará en la segunda de las dos plantas que tiene el inmueble, ahora destinada a gimnasio y oficinas de clubes deportivos (atletismo, fútbol, bádminton, golf...), a los que se buscará una sede alternativa o se intentará reubicar en la planta baja. La iniciativa se incluirá en el Plan Estratégico de la Bicicleta que quiere desarrollar el Consistorio para que Torrelavega sea un referente turístico para los aficionados al mundo del pedal, algo similar a lo que ha logrado Ribamontán al Mar con el surf. El Ayuntamiento estudia hacer lo mismo con el albergue juvenil de La Montaña, que se encuentra cerrado. Tanto el Complejo Deportivo Óscar Freire como la zona conocida popularmente como El Patatal, que suman 141.500 metros cuadrados, pasaron a formar parte del patrimonio municipal el año pasado, tras una pugna administrativa y judicial entre Sniace y el Consistorio, iniciada tras finalizar sin acuerdo el convenio de alquiler de las instalaciones.

La Consejería de Turismo quiere habilitar en la ciudad un albergue para peregrinos porque desde Bezana y Boo de Piélagos sólo existen dos alojamientos en Polanco con pocas plazas disponibles. Se considera necesario aumentar la capacidad de en este tramo para ofrecer mejores servicios a los peregrinos y está previsto que el albergue del edificio expropiado a Sniace disponga de 50 plazas y todos los servicios para el alojamiento y atención a los peregrinos.