El alcalde de Torrelavega amenaza con destituir al concejal de Urbanismo tras desautorizarle de nuevo

En la relación entre el regidor y el edil llueve sobre mojado. Cruz Viadero ya desautorizó públicamente a Oyarbide en 2015, cuando dijo que no habría más modificaciones puntuales del planeamiento urbanístico hasta que entre en vigor el nuevo planeamiento. El alcalde indicó entonces que se realizarían los modificados que «la ciudad necesite». En el caso de ayer, las discrepancias ya se adivinaban desde por la mañana, cuando el concejal, contrariamente a lo que se había anunciado, no acudió a la rueda de prensa en la que Cruz Viadero y el primer teniente de alcalde, Javier López Estrada (PRC), informaron sobre la propuesta que había realizado el equipo de gobierno en la Junta de Portavoces para aprobar el Plan General.

Oyarbide esperó a los periodistas a la salida del Ayuntamiento para facilitarles el calendario que viene defendiendo en las últimas semanas ante el resto de la Corporación. Minutos más tarde, Cruz Viadero llamó a los informadores, uno por uno, para anunciarles que dicho calendario «no tiene ninguna validez» y que el concejal de Urbanismo quedaba desautorizado. «Es una persona muy trabajadora y comprometida, pero se pone algo nervioso y le falta disciplina», dijo el regidor, antes de sentenciar: «No creo que ocurra, pero si sucede una tercera vez me veré obligado a asumir sus competencias».

Cruz Viadero y López Estrada señalaron que la intención del equipo de gobierno es someter el nuevo Plan General a la aprobación inicial el próximo 9 de abril, en una sesión extraordinaria de la Corporación. Antes, PSOE y PRC intentarán alcanzar el «máximo consenso» posible entre los grupos políticos, todo con el objetivo de que, tras las elecciones de mayo, se pueda trabajar «desde el primer día» de cara a la aprobación definitiva del documento. Ambos dirigentes expresaron su confianza en que «va a primar la responsabilidad por encima de los intereses partidistas».

También advirtieron de que si no se avanza en este proceso se corre el riesgo de que finalice el contrato con el actual equipo redactor, que ya se encuentra prorrogado, lo que conllevaría casi seguro «tener que empezar de cero». Igualmente, hicieron hincapié en que el documento es «fundamental» para Torrelavega y sólo se encuentra a falta del acuerdo político, tras el trabajo técnico. En el diálogo con la oposición sólo han marcado una línea roja, el nuevo polígono industrial (Las Excavadas), con el que un grupo (ACPT) está en desacuerdo.

Sin embargo, el concejal de Urbanismo maneja una propuesta de calendario que dice ha consensuado con los técnicos municipales y el equipo redactor, y que considera fundamental para que el proceso de información pública (45 días hábiles) no interfiera en al campaña electoral. Oyarbide plantea que el documento se someta a la aprobación inicial el 22 de febrero como muy tarde. Considera que retrasar el Pleno a abril «podría ser una irresponsabilidad», ya que «la campaña electoral afectaría al proceso participativo de la gente en el Plan General y también habrá el habitual vacío de poder entre ambos mandatos».

El edil socialista recuerda que su propuesta está sobre la mesa desde el 16 de enero y que ningún grupo político la ha rechazado. «No aprobar el Plan General en esas fechas sería una irresponsabilidad para los intereses de Torrelavega, ya que acabaríamos en un pleito con el equipo redactor. Además, ya se dan las condiciones para que le apoye el PP, tras la luz verde al soterramiento, el Plan Estratégico y el protocolo de la estación intermodal», concluyó.