La avenida Menéndez Pelayo sufre una plaga de estorninos

Preguntado por este problema, el concejal de Sanidad Pública, Bernardo Bustillo, ha anunciado la contratación de una empresa que se encargará de ahuyentar con sonidos a los estorninos. Otro edil, el de Medio Ambiente, José Luis Urraca, afirma que esta vez sí está incluida la poda de los árboles de la avenida Menéndez Pelayo en la campaña anual que se viene realizando desde el otoño.

La parada de taxi, la más grande de la ciudad, se está viendo muy afectada. «Esto es un escándalo. Vienen por miles y se dejan caer como cazas japoneses. A veces tenemos que abandonar la parada cuando vienen», explica José Ignacio Pérez, uno de los conductores. «Lo cagan todo y hay días que tenemos que limpiar el coche dos veces. Entre semana echan agua a presión, pero los domingos tiene tela», afirma su compañero José Antonio Obeso, que también se queja de la suciedad que provocan los frutos del aligustre.

Valentina Buturuga, del Café Flamingo, también está muy molesta: «Instalar la pérgola me costó 14.000 euros y ya ves, no puedo poner la terraza. Llamas al Ayuntamiento y se pasan la pelota unos a otros. Es una vergüenza». Otro afectado es Javier Teja, que vende cupones de la ONCE en una cabina próxima: «Huele que apesta y a mis clientes les tengo que pedir que se protejan».