El banco XXL de Torrelavega ya está aquí

La iniciativa fue presentada hace un año e incluye ayudas a los empadronados y diversas medidas para atraer nuevos residentes, todo con el objetivo de que el municipio no baje de los 50.000 habitantes, lo que representaría la pérdida de ingresos, servicios y peso político. En el mismo acto se dio a conocer el logotipo: dos tes enlazadas, una de ellas invertida, con los colores de la ciudad (rojo y verde). Una imagen de marca que tiene su propio hashtag: #Torrelaveganízate.

Tanto el logotipo como el lema fueron colocados ayer por la empresa Serisán sobre el muro de las fuentes de la 'Plaza Roja', corazón de Torrelavega. «Todo es un conjunto de medidas para potenciar la imagen de la marca de ciudad», afirma el concejal de Dinamización Poblacional, Jesús Sánchez, quien precisa que «por primera vez en la última década el número de habitantes está creciendo en Torrelavega».

Cerca de allí, en el no menos emblemático Bulevar Demetrio Herrero, se instalará «a finales de agosto o principios de septiembre» el otro reclamo turístico, más llamativo que el anterior. En lugar de colocar simplemente el nombre de la ciudad con letras gigantes como han hecho Santander, Maliaño, Suances o Comillas, Torrelavega apuesta por un banco gigante como el que, por ejemplo, se topan los visitantes al caminar por el paseo marítimo de Castelldefels (Barcelona). Eso sí, no será giratorio, como anunció en un principio el edil, por el gran peso de la estructura.

El departamento de Obras encargó su construcción al escultor local Lucio Marcos Pernía, con un presupuesto de 15.548 euros (IVA incluido). El artista diseñó los bancos que se colocaron en el Bulevar, después de la construcción del primer aparcamiento subterráneo público de la ciudad en la década de los 90, y lo que hace ahora es adaptar ese diseño a la nueva escala. Los bancos están hechos con acero y láminas de madera para que «la gente no sienta frialdad al sentarse», y son de color blanco para que «el aspecto sea veraniego».

La construcción del 'hermano gigante' ha entrado en la última fase en una empresa de calderería de Santiago de Cartes. El soldador que ayer trabajaba en él parecía haberse convertido en un pigmeo ante la gran estructura: 5,70 metros de ancho y 3 de alto. Falta colocar las láminas de madera y aplicar varias manos de pintura. Lucio Marcos Pernía tiene experiencia, dado que esculturas suyas de gran tamaño se exhiben en varios puntos de Torrelavega y otras localidades como Salas (Asturias) y Calahorra (La Rioja). Confiesa que le ha venido muy bien la «herencia artística» de su padre, el también escultor torrelaveguense Lucio Marcos Estévez.