Una banda juvenil rompe los cristales de una veintena de coches en la última semana

Enrique Sáenz Trigueros, Jefe de la Policía Local, afirma que están actuando conjuntamente con la Policía Nacional y, de momento, no está dando resultado el incremento de la vigilancia con coches patrulla. Tampoco han encontrado todavía colaboración ciudadana, muy importante en estos casos. Los agentes también están tratando de conseguir pruebas a través de las cámaras de seguridad instaladas en diversos puntos de la ciudad.

El concejal del área, Pedro Pérez Noriega, precisa que en la mayoría de los casos no se denuncia robo, dado que en el interior de los vehículos «ya casi nadie deja cosas de valor». «Se supone que son gente joven que se dedica a hacer actos vandálicos y tenemos que pillarlos infraganti. Hay que tener pruebas para poder imputarlos», afirma.

Fernando, vecino de Cartes, aparcó su coche junto a los nuevos edificios del Asilo, en El Valle, en torno a las nueve de la noche del domingo y se le encontró con los cristales de las puertas delanteras rotos cinco horas después, cuando iba a regresar a casa. También vio que habían «revuelto un poco» el interior del vehículo en busca de «algo de valor». «Cuando llegó la Policía -explica- me dijo que era la octava denuncia ese día. Parece que lo hacen por hacer mal, es vandalismo puro y duro. Creo que en la zona de Cartes también ha pasado algo parecido».

Javier Peña Ruiz-Capillas es ciego y cuando fue a recoger su coche en la tarde del viernes, con ayuda de su asistenta, la Policía «le estaba sacando fotos». El vehículo estaba estacionado en la calle José Lucio Mediavilla, junto al parque Manuel Barquín, en una plaza reservada para personas con discapacidad. «Me rompieron el cristal de la ventanilla del conductor. La Policía me dijo que llevaban 14 denuncias ese día. Yo creo que lo hacen por joder. Estamos apañados, es lo que nos faltaba», dice indignado.

Cámaras de seguridad

El Ayuntamiento instaló recientemente cámaras de seguridad en el entorno de la zona de vinos de la ciudad, con el fin de incrementar la capacidad de reacción de los agentes. Los responsables municipales creen que estos dispositivos podrían servir de ayuda en el caso de la banda juvenil que se dedica a destrozar los cristales de los coches, si bien reconocen que es complicado porque «actúa en diferentes puntos de la ciudad». De hecho, vecinos del barrio El Milagro, de Torres, también han denunciado que varios coches han aparecido con «rayones» en su pintura.

No es la primera vez que los coches son protagonistas de actos vandálicos en Torrelavega. Hace varios años fue detenido un individuo que se dedicaba a quemarlos, una acción delictiva que también generó alarma e indignación entre los vecinos. Igualmente, se recuerda otra mala racha en la que los vándalos actuaban rompiendo los retrovisores de los coches. En todos los casos, la colaboración ciudadana es fundamental para la Policía.