El Barrio Covadonga quiere acabar con la inseguridad en el acceso de Mies de Vega

En la memoria del proyecto se señala que el equipo de gobierno de Torrelavega ha promovido en los últimos años diversas actuaciones destinadas a mejorar la movilidad en el municipio. Estas iniciativas, asociadas habitualmente a modos de transporte alternativos al vehículo privado, entre los que destacan el peatonal, el ciclista y el transporte público colectivo, también han comprendido la renovación del viario público para mejorar el tráfico motorizado.

El Consistorio encargó en octubre de 2016 la redacción del proyecto de mejora de intersecciones en el Barrio Covadonga, que tiene como objetivo avanzar en la funcionalidad y seguridad de dos intersecciones: la glorieta existente en la calle Julio Ruiz de Salazar y la confluencia entre la calle Mies de Vega y la Avenida del Besaya.

En el caso de la referida glorieta, los trabajos consistirán en la redistribución de los carriles de acceso a la misma, las aceras y los tramos de carril bici, así como la ampliación del vial de Julio Ruiz de Salazar, el acondicionamiento del pavimento y de las aceras adyacentes, la ejecución de pasos peatonales y ciclistas, la adaptación de la señalización horizontal y vertical a la nueva distribución viaria, y la reposición de los elementos afectados (redes de servicio y mobiliario urbano).

La otra actuación prevista, consistente en construir una nueva glorieta en el cruce entre la Avenida del Besaya y la calle Mies de Vega, no va a realizarse de acuerdo con los informes técnicos. Con el fin de mantener cierta coherencia con el resto de viario municipal, desde el punto de vista técnico se contemplan materiales y principios de diseño similares a los empleados en otras zonas del término municipal.

El concejal de Hacienda, Pedro Pérez Noriega, dijo recientemente en declaraciones a este periódico, con motivo de la próxima aprobación de los Presupuestos para este año, que el equipo de gobierno (PRC-PSOE) tiene una «asignatura pendiente» con el Barrio Covadonga, donde no ha podido atender otras demandas de los vecinos en los últimos años.

112.581

euros es el presupuesto de licitación de la obra, con un plazo de ejecución de cuatro meses

La Asociación de Vecinos Besaya, impulsora de la mayor parte de los avances que ha alcanzado el distrito desde su creación, a mediados del siglo pasado, hizo un balance muy negativo de la pasada legislatura. Según este colectivo, los cuatro últimos años han estado llenos de «promesas incumplidas y despropósitos».

La AA VV dice que estamos viviendo momentos de grandes cambios y dificultades, en los que se necesitan políticos «preparados, comprometidos, honestos y con un proyecto», pero el equipo de gobierno municipal ha dado muestras de «todo lo contrario», dejando pasar estos cuatros años «sin pena ni gloria, o mejor dicho, con más pena que gloria». La asociación vecinal acusaba a socialistas y regionalistas de haber dejado patente su «carencia de ideas e iniciativas». «Ni siquiera han sido capaces de hacer realidad lo prometido», afirmaba.

Este periódico recorrió el barrio con la presidenta del colectivo, Marián Cicero; el tesorero, Jesús Cueto, y uno de los fundadores de este movimiento ciudadano, Agustín Fernández, para que nos mostrasen algunos ejemplos de lo que denunciaban. En primer lugar, criticaban la precaria situación de la céntrica y emblemática Plaza de Covadonga, pendiente de remodelar desde hace varios años, pese a que el Ayuntamiento llegó a presentar el proyecto a los vecinos. Tampoco tienen noticias de la obra de urbanización de las calles perpendiculares a la de Río Ebro (Saja, Pisueña, Deva, Nansa y Pas). Según Marián Cicero, esos viales están «como cuando se hicieron, hace 60 años». «Es la única zona del barrio en la que los servicios públicos no están actualizados. Las aguas pluviales y fecales no están separadas», puntualizaba Jesús Cueto. También es «clave» para la AA VV la «falta de mantenimiento» que se observa en el Bulevar Ronda.