Cantabria y Asturias se abrazan en Torrelavega

El evento, organizado por el Ayuntamiento en la plaza de La Llama, se inició a las 11.00 horas con la apertura de un mercado agroalimentario en el que productores de ambas regiones pusieron a la venta algunos de sus mejores productos, desde bisutería y artesanía a dulces, embutidos, pan, miel, sidra, carnes, empanadas, quesos, anchoas, quesadas...

Media hora después tuvo lugar el desfile por la ciudad de los grupos participantes (coros, agrupaciones de danza, bandas de gaiteros, cofradías gastronómicas...), encabezado por la Real Banda de Gaitas Ciudad de Oviedo, que llamó la atención por su magnífico sonido y el paso sobrio y elegante de sus integrantes.

A continuación, autoridades cántabras y asturianas protagonizaron el acto institucional, precedido de la actuación de la citada banda de gaitas y el prestigioso coro torrelaveguense Ronda Garcilaso, así como la interpretación de los himnos de ambas comunidades autónomas. «Soy uno de los patrocinadores de estos encuentros entre dos pueblos muy parecidos y que se llevan extraordinariamente bien. Cántabros y asturianos son tribus hermanas», señaló el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que se incorporó al evento a media tarde. Por su parte, el vicepresidente, Pablo Zuloaga, que encabezó la delegación cántabra por la mañana, destacó en su intervención «la colaboración y trabajo conjunto» de los dos gobiernos autonómicos y «la unión y hermandad» de ambos pueblos, especialmente relevante en la defensa de la cultura, las tradiciones y el folclore. «A uno y otro lado del Deva nos une una cultura común que debemos cuidar para recordar y preservar nuestra raíz, que es también nuestro futuro», afirmó Zuloaga.

También la consejera de Presidencia del Principado, Rita Clambor, que encabezó la delegación asturiana y disculpó la ausencia de su presidente, Adrián Barbón, hizo referencia a la colaboración institucional de ambos ejecutivos para la mejora de los servicios que van destinados a la ciudadanía, y consideró que Asturias y Cantabria son «tierras homogéneas en lo cultural». Clambor dijo que este encuentro, en el que «lo más importante es la hermandad», es un buen motivo para recordar que «tenemos un pasado común y somos hermanos, y si sabemos aprovechar esto, tendremos un futuro aún más esplendoroso».

En este sentido, la consejera de Presidencia cántabra, Paula Fernández Viaña, recordó la unión de ambos territorios a lo largo la historia, «pueblos hermanos» que en la actualidad mantienen una fuerte relación institucional y de gestión en áreas como la sanidad, la gestión de las emergencias, el Parque Nacional de Picos de Europa, la cultura, el turismo, el desafío demográfico y la negociación de una financiación autonómica «justa» basada en el coste efectivo de los servicios.

El alcalde de Torrelavega, Javier López Estrada, que cerró el acto, aseguró que cántabros y asturianos son «ejemplo de defensa de lo nuestro compartiendo lo de todos», y añadió que a ambos pueblos les diferencian solo «matices». «Somos iguales en lo importante: en la defensa de las tradiciones, en la defensa de nuestra cultura y en la defensa de nuestro patrimonio», afirmó López Estrada.

La fiesta también tuvo su vertiente solidaria para concluir las actividades de la mañana. La Cofradía Cocidos de Cantabria elaboró una comida popular a base de caricos, pan y agua, que vendió a 5 euros la ración. La recaudación se entregará a la Cocina Económica de Santander.

El programa continuó por la tarde con diversas actuaciones musicales y folclóricas. En primer lugar, interpretaron canción montañesa Puri Díaz, Isabel Gómez Cosío e Isidro Terán Ahumada (acordeón), así como Francisco José Cote y Pedro Álvarez. Después subieron al escenario el grupo de danzas Xareu d'ochobre y artistas de tonada asturiana: María Luisa Martínez, Liliana Castañón, José García, José A. Cantu La Vara y Armando Fernández Robledo (gaitero). Seguidamente, actuaron la Agrupación de Danzas Virgen de las Nieves de Tanos, el tenor asturiano Joaquín Pixán y dos cantautores, el también asturiano Pipo Prendes y el cántabro Nando Agüeros, que pusieron punto final al XII Encuentro Astur-Cántabro.

Torrelavega se sumó así a las sedes anteriores de esta cita: Ribadesella, Reocín, Ribadedeva, San Vicente de la Barquera, Ponga, Cabezón de la Sal, Peñamellera Baja, Valderredible, Cangas de Onís, Marina de Cudeyo y Llanera. El objetivo inicial, rememorar las antiguas Asturias de Santillana, se ha visto ampliamente superado por las ganas de hermanarse de dos autonomías vecinas.