La carretera para descongestionar el tráfico en Barreda estará lista el próximo verano

Junto a los alcaldes de Torrelavega, Javier López Estrada, y Santillana del Mar, Sara Izquierdo, Media visitó la nueva infraestructura, que implica la ampliación de la vía para bicicletas y peatones en uno de los márgenes, y destacó la coordinación de las administraciones públicas para minimizar los efectos a los vecinos durante la ejecución de los trabajos y terminar los mismos en los plazos previstos. En este sentido, el consejero de Fomento pidió disculpas a los afectados por los perjuicios ocasionados para la ejecución de los trabajos, que han coincidido además con la construcción de la vía por la que circularán los trenes mientras se realiza la integración ferroviaria en Torrelavega.

Media recordó que la construcción del vial Duález-Viveda conllevará una inversión «altísima», tras el modificado del presupuesto inicial para la retirada de residuos contaminados «no peligrosos» en una de las parcelas de Sniace, lo que ha encarecido la obra en 2,2 millones, pasando a superar los 8 millones.

Según señaló, el objetivo del Gobierno regional es concluir la obra del nuevo vial a finales de julio, dado el avance actual de los trabajos. Media añadió que se reanudarán ahora las obras de otro tramo de este proyecto, en el puente sobre el arroyo Corrino, en Viveda, en el otro extremo de la carretera. A comienzos de diciembre, se prevé ejecutar el hormigonado de ese tramo.

Por su parte, ambos alcaldes valoraron positivamente el alcance de esta inversión del Gobierno cántabro para Santillana del Mar y Torrelavega. Sara Izquierdo señaló que es una «mejora considerable» y agradeció la implicación del consejero en la ejecución de esta infraestructura. Por su parte, el regidor de Torrelavega dijo que es una de las obras más importantes para el municipio y destacó que los trabajos y los cortes de tráfico que han afectado al Puente de Los Italianos hayan finalizado en el plazo previsto, al ser un tramo «especialmente sensible».

Este puente sobre el río Saja-Besaya, de unos 160 metros de longitud, permanecía cortado desde hacía dos meses en un sentido de la circulación, entre Barreda y el complejo deportivo Óscar Freire, con el fin de poder ejecutar la ampliación de la vía eliminando la antigua línea de ferrocarril que discurría paralela desde Sniace. Para la ejecución de estos trabajos se ha tenido que poner una pantalla provisional para la sujeción de la catenaria y durante varias jornadas las obras se han realizado en horario nocturno para no afectar al tráfico ferroviario. En la Avenida de Solvay se registraron retenciones de tráfico en horas punta.