Fallece Antonio Fernández Villanueva, fundador del Grupo Fernández Jove

La capital del Besaya conoció este miércoles con pesar la noticia del fallecimiento, a los 95 años, del presidente de honor y fundador del Grupo Fernández Jove, una firma que pese a su crecimiento y desarrollo conserva un marcado carácter familiar –que alcanza ya a su tercera generación–, con una expansión internacional que la ha llevado a estar presente en medio centenar de países en la actualidad.

«Ha sido una persona clave para el tejido industrial de la ciudad. Además de un hombre entrañable al que se le echará de menos por las calles de la ciudad que le acogió hace ya tantos años. Deja una familia magnífica y una de las empresas más importantes de nuestra región», resumía el alcalde de Torrelavega, Javier López Estrada.

La trayectoria del Grupo Fernández Jove, que hoy ofrece servicios de ingeniería para la integración de sistemas hidráulicos, neumáticos y eléctricos, válvulas en diferentes materiales para el control de fluidos y sistemas pasamuros para cables y tuberías y está especializado en el sector naval, corre paralela a la de su impulsor, aunque la biografía profesional de éste comenzó mucho antes.

La infancia de Antonio Fernández Villanueva coincidió con la posguerra española, una época de penurias que le obligó, desde bien pequeño, a arrimar el hombro junto a su familia para salir adelante, y a él le tocó ayudar en casa en las tareas agrícolas y ganaderas. Con sólo 24 años, hizo la maleta, en la que llevaba poco más que su título de tornero oficial de primera, para buscar trabajo y un futuro en Venezuela: él mismo recordaba, al evocar aquellos años, que tuvieron que vender una vaca para poder pagarle el pasaje.

Tras pasar 18 años en aquel país, decidió regresar a España, primero para trabajar con su primo, empresario reconocido del Besaya, y después, ya en 1972, para abrir su propio negocio, la Ferretería Villanueva, en Torrelavega. En una entrevista publicada en El Diario Montañés contaba con orgullo cómo partiendo de aquella pequeña tienda «donde vendíamos candados y cadenas para bicicletas» habían crecido «hasta expandirnos hacia el exterior con proyectos muy interesantes, como la participación en la fabricación de un submarino».

Suele decirse que nadie es profeta en su tierra, un refrán que no se ha cumplido en el caso de Fernández Villanueva, a quien su evidente éxito en los negocios avala como triunfador, y que recibió en vida el reconocimiento a su valía: en 2022, este mismo periódico lo distinguía con un galardón a su trayectoria en la séptima edición de los Premios Emprendedores Cantabria. Él mismo explicaba entonces cómo el trabajo y la inquietud empresarial estaban detrás de esa trayectoria profesional tan brillante. «Toda la vida he sido una persona muy optimista: siempre se te pasa por la cabeza que algo puede salir mal, pero las ganas de superación son mayores y eso es esencial para poder emprender y seguir avanzado. Y este es un pensamiento que he mantenido y mantengo: tengo costumbre de pasarme habitualmente por la empresa y me gusta animar a la familia y a las personas que allí nos rodean para transmitirles el mismo deseo de continuar y de mirar hacia delante».

Ese mismo año, en el que la empresa cumplía medio siglo, anunciaba una inversión de 1,7 millones y la contratación de sesenta nuevos trabajadores, hasta alcanzar una plantilla cercana a los doscientos empleados.

En 2024, fue CEOE-Cepyme la que reconoció la labor del Grupo Fernández Jove con la entrega de su galardón a la mejor inversión estratégica, premiando así «el trabajo serio y riguroso, la especialización y la cualificación empresarial y la constante expansión internacional en un sector líder tecnológico donde compite con empresas a nivel global».

El acto de despedida a Antonio Fernández Villanueva tendrá lugar este jueves, a las 13.30, en la capilla del Crematorio Municipal de Río Cabo, en Torrelavega.