La finca de Mies de Vega reservada para una residencia, a la venta por dos millones

El geriátrico todavía no existe, pero el anteproyecto elaborado por encargo de los propietarios ya da algunas pistas de cómo puede ser. En él, se señalan las 120 plazas como máximo que podría tener este centro, distribuidas en cuatro unidades residenciales, o la afectación del desarrollo de esta propuesta a ocho parcelas catastrales. El anuncio de la inmobiliaria Engel & Völkers también da pistas y sugerencias de cómo podría ser el desarrollo de esta zona al margen de la residencia, para cuyo desarrollo «no serían necesarios grandes cambios en la topografía» dado el carácter prácticamente llano del terreno, con una ubicación «inmejorable» e «ideal para el uso propuesto». Además de este edificio destinado a la residencia, en esta misma parcela «se podrían construir apartamentos tutelados adyacentes al centro».

Basta darse un paseo por la Ronda para cruzarse con la finca, ubicada entre la ribera derecha del río Besaya y el Bulevar. Sin estar en el corazón de Mies de Vega, la finca se sitúa en ese costado de la ciudad pendiente de desarrollar, un especie de oasis verde a un minuto del casco urbano. Y seguirá siendo así hasta que en Torrelavega no exista un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y se vaya troceando la zona y creando planes parciales. Mies de Vega tiene cerca institutos, centros comerciales y equipamientos deportivos -eso también lo recuerdan en la inmobiliaria-, pero su desarrollo urbano lleva a la espera de un nuevo planeamiento urbanístico de la ciudad desde hace cerca de dos décadas.

Ese es el tiempo que lleva el Ayuntamiento tratando de renovar el PGOU; aunque parece que será en esta legislatura cuando se haga realidad: el Gobierno de Cantabria publicó hace unas semanas la Memoria Ambiental de este escrito urbanístico. En él, la Dirección General de Urbanismo y Ordenación del Territorio realiza distintas correcciones de cara a la revisión del documento por parte del Consistorio. Después, este podrá ser aprobado de forma provisional en un Pleno y remitido de nuevo al Ejecutivo, con vistas a su aprobación definitiva en algún punto antes de 2027.

La salida al mercado de este terreno es importante no sólo por el importe de la operación, dos millones de euros, sino porque hace años que se cruzó con los intereses del Ayuntamiento y la ubicación de los huertos municipales de Mies de Vega, que ahora pasarán forzosamente a Sierrapando. Los huertos de Mies de Vega ya tenían las horas contadas y ahora mucho más. Según informan desde la Concejalía de Medio Ambiente, el Ayuntamiento notificará a los usuarios la necesidad de abandonar estos terrenos «en noviembre», con vistas al desalojo de la zona en lo que resta de 2024.

El Ayuntamiento y los propietarios hacen efectivo así el fin del convenio de cesión que sellaron en la segunda mitad de la anterior década -que realmente terminó hace años y ha continuado en precario-. Gracias a este trato y la creación posterior de 45 huertos, esta finca de 3.000 metros cuadrados pasó a ser un foco clave para muchos vecinos interesados en el desarrollo de huertas y la agricultura. Ese punto pasará ahora a Sierrapando y con más parcelas que nunca, hasta 94, si bien la apertura sigue acumulando retrasos evidentes.