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El teléfono sigue sin sonar. Dos semanas después de que el Ministerio de Fomento prometiera cerrar las expropiaciones por las obras del futuro ramal entre Sierrapando y Polanco para aligerar el tráfico en el nudo de Torrelavega, los afectados siguen sin saber cuánto dinero recibirán ... ni a dónde podrán ir cuando las excavadoras derriben sus casas. Entre tanto, lo que antes era «un limbo» ya se ha convertido en «un paripé» para estos vecinos, una situación de incomunicación que sólo cambia cuando alguno de ellos mueve ficha y llama personalmente a los responsables de esta obra de mejora de la autovía A-67. Y aun así las dudas no se resuelven.
La única respuesta que obtienen desde la Demarcación de Carreteras es que el dinero para cerrar la operación todavía no ha llegado porque los Presupuestos Generales están prorrogados -el Ministerio lo sabe desde el primer minuto- y esto ralentiza la gestión administrativa. «Es normal que esta circunstancia retrase los trámites, pero las expropiaciones se resolverán en abril y los dueños conocerán al fin cuánto dinero les corresponde», zanjó el jefe del departamento, Francisco Hernández.
Graci Pereda es la vecina que tomó la iniciativa y terminó tecleando el número de Fomento el jueves pasado. «No sé cuánto vale mi casa ni el terreno. Nos han dicho que hay que esperar, así que seguimos sin saber nada. Ha llegado un punto en el que ya me da igual todo, que vengan cuando quieran. Un día nos dicen que mañana, y al siguiente que pasado... No queda más remedio que conformarse», resume.
Su testimonio sintetiza la resignación de todos los afectados por la obra. José Valencia lo manifestaba a este periódico hace más de dos semanas y lo vuelve hacer ahora: «Lo que nos interesa sobre todo es conocer la oferta. Todo esto debería estar ya trabajado, pero no lo hacen. Somos nosotros los que tenemos que llamarles a ellos y luego ir casa por casa para comunicárselo a todos. El sistema no funciona».
Por su parte, el jefe de la Demarcación de Carreteras insistió en que «todo sigue según lo previsto y no ha habido ningún obstáculo en el proceso». Tal y como aseguró Hernández, la ausencia de unos Presupuestos General y la prórroga de los anteriores -aprobados por el anterior Ejecutivo- ha retrasado la tramitación.
El técnico apeló a la tranquilidad de los expropiados al tiempo que aseguró que «los temas administrativos no son tan exactos como para poder asegurar que se podrá cumplir un plazo en una semana». Y zanjó: «Ha habido un pequeño retraso, pero en abril se cerrarán las expropiaciones con toda seguridad».
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